El dueño de un negocio quería que la cortesía se pusiera de moda de nuevo en los comercios. Austin Simms, el propietario de una cafetería en Roanoke, Virginia, utilizó la forma en la que los clientes se dirigían a los cajeros y camareros para calcular cuánto tenían que pagar por su café.
El cartel de precios muestra lo que los clientes deben decir para recibir su café a un precio determinado. Si el cliente se acerca al mostrador y simplemente dice "café pequeño", tendrá que pagar 5 dólares por ese café. Pero al decir "café pequeño, por favor" el precio baja a 3 dólares.
"Siento la necesidad de resolver todas las injusticias que pueda resolver en el mundo, y por eso decidí empezar a cobrarle más a la gente que no se tomaba el tiempo para saludar y conectar con el empleado. Uno tiene que darse cuenta de que los que están detrás del mostrador también son personas", le dijo Austin a WDBJ7.
Un buen "por favor" al pedir un café pequeño le ahorrará al cliente. Y si el cliente dice "Hola, un café pequeño, por favor", el café solo costará .75. En otras palabras, mientras más modales se usen, mayores serán los descuentos.
La nueva estrategia no falló. Funcionó bastante bien. Muchos clientes entraron y usaron sus mejores modales. Es algo bueno, incluso si solo lo hicieron para conseguir un café con descuento.
Al final, el cartel con los precios del café se hizo viral. Cuando la WDBJ7 le pidió al dueño de la tienda que hablara un poco sobre su estrategia, él dijo que decidió empezar a cobrarle más a las personas que no se tomaban el tiempo de saludar y conectar con los otros seres humanos. Es probable que este gerente siga haciendo cosas para animar a la gente a ser más amable y cortés, y a usar los buenos modales.
Cuéntale esta historia a tus vecinos, y no te olvides de decir "por favor" y "gracias" cuando pidas tu café. ¿Qué piensas sobre las acciones de Austin? ¿Estás de acuerdo con su estrategia? Déjanos tu opinión en los comentarios, y comparte esto con tus amigos y familiares.
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