Si te gustan los perros, es probable que te guste la raza pastor alemán. Muchas personas creen que estos perros grandes son peligrosos y hostiles debido a su tamaño, pero eso no es verdad.
Aunque son muy usados como perros policía, eso no significa que no puedan ser unas buenas mascotas familiares.
Los pastores alemanes también pueden ser dulces, leales y buenos compañeros. Obviamente, como sucede con todos los animales, uno recibe lo que da.
Cuando cuidamos y les brindamos amor a estos perros, ellos nos entregarán su afecto y su docilidad. Sin embargo, si tratamos a estos perros con crueldad y negligencia, ellos pueden mostrarse hostiles, tal como ocurre con cualquier otra raza. Un pastor alemán llamado Rocco vivió en carne propia las consecuencias de los estereotipos negativos que mucha gente tiene sobre su raza.
Rocco pertenecía a una familia que decidió asumir la responsabilidad de cuidar a un pastor alemán. Era fiel y cariñoso con la familia que lo adoptó. Pero debido a su raza, el perro alcanzó un gran tamaño, desarrollando dientes fuertes y garras poderosas. Según The Dodo, cuando su dueña se dio cuenta de que estaba embarazada, empezó a preocuparse por tener a un perro tan grande cerca de su futuro bebé.
Debido a que los pitbulls, los rottweilers y los pastores alemanes (entre otras razas) tienen una mala reputación, los dueños del perro se volvieron paranoicos y tomaron una decisión triste e impulsiva: llevaron a Rocco a un refugio de animales ubicado en Dallas. El perro entró en una depresión por haber sido abandonado, volviéndose introvertido y apático hacia la vida.
Incapaz de adaptarse a la vida en el refugio, el pastor alemán estaba retraído y no mostraba interés ni en los humanos ni en los otros perros. Sin embargo, un día el refugio recibió una visitante que le cambiaría la vida a Rocco. La mujer decidió brindarle refugio para que le hiciera compañía a su propio perro por un tiempo. Ella sabía que Rocco necesitaba adaptarse de nuevo para volver a sentir confianza en los seres humanos, y por eso hizo todo lo posible para que el perro se sintiera como en su casa, con la idea de que volviera a ser la mascota juguetona y cariñosa de siempre. Después de crear una cuenta en Instagram para Rocco, la mujer empezó a publicar videos y fotografías adorables del pastor alemán, para tratar de encontrarle un hogar definitivo. Afortunadamente el perro fue adoptado, y con suerte, no lo volverán a abandonar.
Es evidente que los animales pueden desarrollar problemas de confianza después de sufrir un abandono, y por eso es importante entender que las mascotas constituyen un compromiso de por vida, y que todos merecen contar con un hogar cariñoso para siempre.
¿Qué opinas de la historia de Rocco? Déjanos tu mensaje en los comentarios. ¡Y pásales esto a tus amigos y familiares!
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