Incluso el desayuno del típico granjero demuestra que las papas y los huevos se llevan muy bien culinariamente. Y en una quiche o en una tortilla española vemos que los huevos también saben muy ricos con las verduras. Pero en el siguiente pastel añadimos un elemento muy especial: las papas fritas. Sin duda, la mejor forma de comerlas.
Vas a necesitar:
- 200 g de papas cortadas para freír
- 250 g de jamón
- 120 g de cebolla picada
- 60 g de pimiento verde
- 60 g de pimiento rojo
- 2 dientes de ajo
- 120 g de queso cheddar
- 10 huevos
- 100 g de crema (nata)
- Sal
- Pimienta
Se hace así:
1. Hornea las papas a 180 ºC con la circulación de aire activada.
2. Corta la cebolla, el ajo, el pimiento y el jamón en trozos pequeños. Fríe todo brevemente en una sartén apta para horno y deja cocer a fuego lento durante unos 5 minutos.
3. Revuelve los 10 huevos con la crema (nata) y sazona la mezcla con sal y pimienta. Después viértela en la sartén.
4. Cuando los huevos revueltos estén casi listos, espolvorea el queso cheddar y reparte las papas fritas una por una sobre el queso.
5. Agrega sal a las papas fritas una vez más y mete la sartén al horno por 15 minutos a 200 ºC con la circulación de aire activada.
El pastel de papas fritas es un plato perfecto para niños. Además se prepara muy rápido y sin gran esfuerzo.
Aquí puedes encontrar las recetas de las dos quiches de patata que aparecen en el vídeo extra:
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