Cuando somos pequeños nos toca aprender millones de cosas. Todo es nuevo y cada cosa que vemos tenemos que irla grabando en nuestra memoria. El aprendizaje es igual para los humanos y los animales, los padres se convierten en una fuente inagotable de saber.
Esta familia de labradores son un ejemplo de como los cachorros aprenden de sus padres. Y es que saber nadar es tan importante que este padre se lo enseña a sus hijos en cuanto puede.
Los cachorros están tan atentos que verlos despierta una ternura enorme.
Los perros disfrutan con el agua de forma increíble. Chapuzones, saltos y hasta sumergirse en el agua, pero todo bajo la atenta mirada de su padre.
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