Estos osos del zoológico Bandung en Indonesia están en tan malas condiciones que cuando se acerca gente se comportan de forma muy distinta a su naturaleza. Estos animales han dejado de lado su comportamiento natural y han comenzado a mirar fijamente a los visitantes del zoo en la isla de Java, para que les tiren cualquier cosa que puedan comer.
Ya ni siquiera podemos plantearnos el tema de la libertad o el trato que tienen los animales en circos o zoológicos, aquí hablamos de estar al borde de la muerte por inanición.
Los sun bears (oso solar) viven en hábitats del bosque tropical del sudeste asiático. Además, está clasificada como especie vulnerable por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). La deforestación a gran escala que ha ocurrido en todo el sudeste asiático durante las últimas tres décadas ha reducido drásticamente el hábitat adecuado para estos osos.
Se estima que la población mundial ha disminuido en más del 30% en las últimas tres generaciones de osos. Eso sin contar con otros tantos que se encuentran en situaciones tan drásticas como estas. Ningún ser vivo debería suplicar comida.
Frente a los visitantes del zoo los animales están desesperadamente alerta por alcanzar algo que llevarse a la boca. Los osos buscan los trozos de comida que caen al suelo sin descanso, es una imagen que rompe el corazón a cualquiera.
Y que desde luego no debería repetirse nunca más.
En este mismo zoo, en mayo de 2016, un elefante moría por circunstancias desconocidas. Al conocer los hechos la CNN pidió explicaciones al zoológico, pero éste nunca contestó.
No se deberían consentir cosas como estas bajo ninguna circunstancia. Cada una de las personas que cometiera el error de ir, y perpetuar, a sitios así debería haber denunciado la situación.
Los animales no están ahí para divertirnos.
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