Hoy, los militares del Aeropuerto Santa Lucía, en la ciudad de México, nos han demostrado que todos podemos sumarnos a esta lucha tan importante.
Durante años, muchos perritos comenzaron a merodear por el Aeropuerto Internacional en búsqueda de un techo para pasar la noche.
Algunos empleados del lugar los ayudaban en la medida de lo posible y les ofrecían un poco de comida.
Con el paso del tiempo los perritos comenzaron a instalarse en la zona militar del aeropuerto y fue entonces cuando una ingeniera tuvo la mejor la idea.
El área militar del aeropuerto contaba con un parque infantil que estaba a punto de ser derribado.
Pamela Díaz sabía que cada vez llegaban más perritos a la zona y propuso convertir el parque en un albergue para los peluditos. La idea fue aplaudida por todos y finalmente aprobada.
El parque no se derribó y lograron aprovechar la infraestructura para hacer un hermoso refugio. Lo que antes era una biblioteca infantil se remodeló para convertirlo en el área para los perritos menores de tres meses.
El refugio cuenta con veterinarios y especialistas que trabajarán junto a los perritos para prepararlos y convertirlos en candidatos de adopción.
“El objetivo es dar hogar temporal para que se adapten a la vida entre humanos y otros canes. Queremos que sean adoptados por una familia”, dijo la subteniente Carla Medellín quien además es médico veterinario.
Actualmente cuenta con cerca de 70 perritos que están recibiendo comida y ya no deben pasar una noche más en las calles.
Se espera que muchos de ellos se conviertan en exitosos K9 y trabajen formalmente en el aeropuerto ayudando en labores de seguridad como detección de Covid-19 o drogas.
“Ya hacía falta. Es muy triste ver a los perritos sufrir con las lluvias y el exceso de calor. Gracias por ayudarlos”, comentó un usuario en las redes.
El programa de rescate también procura que todos los peludos sean esterilizados para luchar contra la sobrepoblación de perritos de la calle que tanto afecta al país.
“Todos nuestros perritos que son dados en adopción ya se van esterilizados, vacunados y desparasitados. También les hacemos seguimiento”, dijo un portavoz del refugio.
La dedicación de estos militares por los perritos de la calle logrará salvar a decenas de peluditos que necesitaban de una segunda oportunidad. Su acto de bondad es una muestra más de que todos podemos aportar nuestro granito de arena para apoyar a los animalitos sin hogar.
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