Nuestras mascotas son nuestros mejores amigos. A veces nos preocupamos por ellos más de lo que nos preocupamos por nosotros mismos. Cuando les pasa algo, se nos empieza a subir la adrenalina y nos desesperamos hasta que los podemos tener de vuelta en casa, sanos y salvos. Eso fue lo que le pasó a una familia cuya perra quedó atrapada dentro de un túnel subterráneo.
Tracy Arballo es la orgullosa dueña de una alegre perra llamada Taylor, a la que le encanta correr, explorar y hacer travesuras por todo el patio. Pero justo por debajo del patio de concreto pasa un largo túnel. Al principio, los Arballo no sabían cuándo había sido construido el túnel, ni cuál era su propósito. Pero fue entonces cuando conocieron a Godzilla.
Godzilla es una tortuga de 36 kilos a la que empezaron a llamar "la hermana de Taylor" después de que ambas se conocieran en situaciones poco alentadoras. Godzilla fue la que construyó el túnel subterráneo. No era raro que Taylor se la pasara metiendo sus narices en el túnel de la tortuga. A veces, cuando se sentía muy valiente, hasta se metía dentro del túnel.
Un día, Taylor se metió varios metros dentro del túnel. Su dueña no estaba preocupada, porque la perra ya lo había hecho antes y se salía por sí sola. Sin embargo, en una ocasión Taylor no regresó, así que Tracy empezó a preocuparse. Todo indica que Godzilla estaba en el túnel justo cuando la perra se atrevió a entrar. La tortuga siempre ha sido bien terca, y parecía estar harta de las incursiones de la perra. Tal vez por eso, se quedó inmóvil en su posición, impidiéndole a la perra salir del túnel.
Así, los dos animales terminaron atrapados en el hueco. Ninguno de los dos estaba en peligro, y tampoco sentían dolor, pero obviamente era una situación muy incómoda. La extraña pareja de tortuga y perra estaban a casi 2 metros bajo tierra, por lo que la familia fue incapaz de liberarlas. Ya en este punto, la desesperación se había apoderado de todos.
Tracy se dio cuenta de que iba a necesitar ayuda, así que llamó al departamento de bomberos. Los agentes llegaron rápido y empezaron a tratar de liberar a los dos animales. El grupo de rescate trabajó codo a codo con la familia Arballo durante media hora, hasta que finalmente lograron liberar a Taylor y a Godzilla, ofreciéndole a la tortuga un montón de lechuga fresca para que se animara a salir.
¡Qué historia tan maravillosa e increíble! Un lote de lechuga fresca bastó para liberar a las das prisioneras. Comparte este divertido artículo con tus seres queridos. ¡Y déjanos tus comentarios abajo!
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