Si tienes algún gato en tu casa deberías de saber que no les gusta el frio. Al igual que los seres humanos, los gatos son muy sensibles a los cambios bruscos de temperatura, por lo que es normal que se adapten con mayor rapidez a climas cálidos. Sin embargo, más allá de los gustos que pueda tener cada felino, las temperaturas bajas pueden conllevar a que sufran problemas de salud, desde resfriarse hasta llegar al punto de sufrir de hipotermia.
Es por ello que debemos ser precavidos y tomar algunas medidas que les asegure una óptima calidad de vida a nuestro gato en invierno, siempre teniendo como prioridad su bienestar. Teniendo en cuenta esto, hemos querido crear este artículo, donde te daremos algunos consejos para sepas cómo cuidar a tu gato en invierno.
1- Verifica la salud de tu gato antes de la llegada del invierno
Como es normal, siempre debes saber que es primordial que todo gato necesita recibir una atención veterinaria adecuada durante toda su vida. Esto no solo quiere decir que debas llevarlo una vez cada 6 meses, y estar al día con sus vacunas y desparasitaciones, sino que también tenemos que brindarle una dieta muy equilibrada y nutritiva, un ambiente seguro y una adecuada estimulación física y mental.
Lleva a tu felino al veterinario unas semanas antes de la llegada del invierno para que le realicen su respectivo chequeo de rutina, y actualizar sus vacunas si es de ser necesario. También el veterinario podrá brindarte unos sabios consejos sobre cómo fortalecer el sistema inmunológico de un gato, con el fin de aumentar su resistencia física, reforzar sus defensas naturales de todo su organismo y ayudar a prevenir cualquier aparición de alguna patología que lo ponga en riesgo.
2- Mantén atención a la dieta del gato en invierno
Este es uno de los aspectos de mayor importancia para que el gato goce de un estado de salud optimo durante todo el año. Ahora bien, durante el invierno es cuando debemos estar aún más atentos. Es por ello que debemos prestar mucha atención a la nutrición que le brindamos a nuestros felinos, y esto se debe a que en esta época del año necesitaran de mayor energía para ayudar a preservar su calor corporal. Además, es importante que nuestro gato tenga una buena y equilibrada nutrición para que este se mantenga fuerte y sano en lo físico y cognitivo.
Si tienes de un gatito cachorro o anciano, estos deben tener mayores cuidados, ya que sus cuerpos son sensibles y frágiles a las bajas temperaturas. Consulta con tu veterinario sobre cuál debe ser la nutrición adecuada para tu gato según su edad y estado físico. Tampoco debes olvidar consultar con el veterinario la incorporación de vitaminas naturales y suplementos.
Otro punto al que tenemos que prestar atención es que los gatos suelen disminuir el consumo de agua. Es por ello que debemos estar pendientes que beba agua para así evitar que sufra un cuadro de deshidratación. Si le brindamos un ambiente donde nuestro gato se sienta cómodo es más probable que beba agua después del juego. Ahora bien, si el gato no muestra interés en beber agua, puedes incorporar a su dieta alimentos húmedos.
3- Bríndale un refugio exterior a tu gato
Brindarle un refugio exterior es la mejor idea para aquellos gatos que tienen acceso al exterior. Así evitaremos que se expongan a la intemperie.
Puedes conseguir estas casetas fácilmente en una tienda para mascotas, pero si utilizas toda tu creatividad puedes construir una por tu propia cuenta. Recuerda que en el interior debe haber un espacio para un escondite, cueva o cama en forma de nido donde pueda jugar y estar cálido.
4- Ayuda a tu gato a mantenerse cálido con un abrigo
Un abrigo para gatos es una herramienta perfecta para ayudar a conservar la temperatura corporal de un gato. Cuando decidas comprarle un abrigo a tu gato debes de prestar principal atención a los materiales con los que esta confeccionado. Lo perfecto es que estén elaborados con materiales hipoalergénicos. Evita aquellas prendas que tienen adornos o botones, ya que se pueden caer y se ingeridas por nuestro gato.
Algo que es lógico, pero no menos importante, es conocer las mediadas de tu gato para elegir un abrigo que se ajuste perfectamente a su cuerpo. Nunca debes olvidar que el bienestar y comodidad del gato siempre debe ser lo primero.
5- Conserva una temperatura equilibrada en el hogar
Uno de los puntos principales al cuidar un gato en invierno es evitar exponerlo a cambios bruscos de temperatura. Es por ello que el interior de nuestros hogares siempre será el sitio más seguro y protegido para nuestros amigos gatunos en el invierno. Ayudándonos de la calefacción de nuestro hogar podremos brindarle un ambiente con una temperatura agradable para nuestros mininos. Sin embargo, un ambiente muy seco resulta perjudicial para la salud de nuestro gato, y es por ello que debemos prestarle atención a la humedad.
Otro punto muy útil es mantener lista una habitación con buena iluminación, donde tu gato pueda disfrutar del calor del sol. Aunque no es recomendable que tenga una exposición excesiva a los rayos solares, diseña un buen plan de horarios para que tu mascota se pueda exponer al sol en horas seguras.
Si tu gato tiene la costumbre de realizar paseos fuera de casa, debemos tener mucho cuidado y evitar que lo haga por las noches. La hora perfecta para que lo realice es durante la tarde, cuando la temperatura del ambiente es un poco más alta. Si el clima esta lluvioso o con nieve, procura juega con tu gato en casa para que este gaste su energía y se mantenga feliz sin la necesidad de salir.
Otra recomendación es que revises a tu felino después de cada paseo para asegurarte que no esté mojado. Si percibes que lo está, sécalo con una toalla limpia. Para cuidarlo del frio envuélvelo en una toalla o manta limpia.
Comentarios