Fumar, beber alcohol y alimentarse de comida rápida: todas estas cosas son obviamente perjudiciales para la salud. Pero también hay muchas personas que tienen hábitos poco saludables y no lo saben. La razón se debe a que dichos hábitos se consideran sanos en general.
Este artículo muestra qué hábitos aparentemente inofensivos hay que tener en cuenta.
1. Cepillarse los dientes
Cepillarse los dientes es importante para protegerlos de la caries y la periodontitis. Sin embargo, cepillarse con demasiada frecuencia también puede ser perjudicial. Los dentistas recomiendan cepillarse bien los dientes dos veces al día. De lo contrario, puedes irritarte las encías y dañar el esmalte.
Tip: puedes refrescarte la boca con enjuague bucal o con un spray bucal entre los dos cepillados del día.
2. Consumo de agua
Muchas personas tienen problemas para beber lo suficiente durante el día. Pero rebasar cierta cantidad de líquido al día puede ser igual de insalubre. Es decir, una mayor ingesta de líquidos hace que el nivel de sodio en la sangre baje bruscamente. Esto puede provocar síntomas como dolores de cabeza, náuseas y escalofríos. Estos síntomas pueden ocurrir durante una carrera muy larga y agotadora en la que el consumo de agua sea relativamente alto.
Tip: en lugar de beber una gran cantidad de líquido de una vez, debes beber varios vasos de agua o té durante el día.
3. Bronceado
Todo el mundo sabe que los baños de sol intensivos y, sobre todo, las quemaduras de sol no son saludables. Sin embargo, de lo que mucha gente no se da cuenta es de que cada minuto de sol, con o sin crema, aumenta el riesgo de cáncer de piel. Ir a un solárium es igual de peligroso. Los estudios muestran que las personas tienen un 20% más de riesgo de cáncer si van a un salón de bronceado regularmente.
Tip: la protección solar es necesaria si pasas mucho tiempo al aire libre, incluso en invierno. Si buscas una alternativa a tomar el sol, puedes recurrir a los autobronceadores.
4. Deportes
El deporte puede ayudarte a equilibrar tu vida laboral y a aliviar enfermedades como las migrañas y la depresión. Sin embargo, si no eres un atleta profesional, no debes exagerar con el entrenamiento. De lo contrario, se corre el riesgo de desgastar los huesos y de que las células inmunológicas se atrofien. Por lo tanto, debes planificar días de descanso para que tu cuerpo pueda regenerarse.
Tip: de dos a cuatro sesiones de entrenamiento por semana son suficientes para un atleta aficionado.
5. Analgésicos
Sin duda, los analgésicos son un gran invento. Después de todo, ayudan a aliviar dolores que de otra forma te atarían a la cama. Sin embargo, no deben tomarse con mucha frecuencia. Porque si el cuerpo se acostumbra a tomarlos regularmente, pide más. Esto se manifiesta mediante dolores de cabeza, creando un círculo vicioso. Además, hay analgésicos que causan irritación en el estómago y el hígado.
Tip: si tienes algún dolor, debes sopesar si es tan malo como para tomar un analgésico. Para los dolores de cabeza, por ejemplo, a veces un paseo al aire libre o el uso de alternativas a base de hierbas puede ayudar.
6. Despertarse muy tarde
La idea de dormir mucho el fin de semana para poder recuperarnos de las desveladas de la semana suena como un sueño. Desafortunadamente es perjudicial para el organismo. "Cambiar los tiempos de sueño altera el ritmo del cuerpo y, por lo tanto, puede debilitar el sistema inmunológico", explica la nutricionista Julianna Hever.
Tip: para no confundir al cuerpo, debes tener el mismo ciclo de sueño todos los días. Si trabajas en turnos, deberías consultar a tu médico para ayudar a tu organismo a sobrellevar mejor esta situación.
7. Beber té
El té en sí mismo es saludable. Suministra líquido al cuerpo, puede ser un remedio herbal y sabe muy bien. Sin embargo, si lo bebes antes de acostarte, puedes tener problemas para dormirte si el té contiene teína.
Tip: por la noche es mejor tomar tés de hierbas para preparar tu cuerpo para el sueño.
8. Suplementos alimenticios
Actualmente puedes comprar un suplemento alimenticio para casi todas las pequeñas molestias físicas en las farmacias y en Internet. Los comprimidos multivitamínicos son probablemente los más populares cuando se trata de proteger el sistema inmunológico. Sin embargo, el efecto positivo de de estos productos no se ha demostrado científicamente. El consumo excesivo de estos suplementos puede incluso tener efectos negativos en la salud, ya que en grandes cantidades pueden suponer una carga para el hígado.
Tip: siempre debes consultar con tu médico antes de tomar suplementos alimenticios regularmente.
9. Jugos frescos
Mucha gente piensa que los zumos son una buena manera de incorporar más fruta en su dieta. Además de que los jugos comerciales suelen contener azúcar añadida, los beneficios de la fruta se pierden al ser exprimida.
Tip: es mejor preparar una sabrosa ensalada de frutas en lugar de un vaso de jugo.
10. Saltarse el desayuno
Muchas personas dejan de desayunar para perder peso. Aunque esto ahorra las calorías de una comida entera, también aumenta el deseo de más comida. El cuerpo está hambriento y sediento después de dormir. Así que si le niegas el desayuno, solo se siente más hambriento. Esto se manifiesta en un apetito casi incontrolable, generalmente de alimentos no saludables.
Tip: si no tienes tiempo o no puedes comer nada temprano en la mañana, puedes preparar un pan o una avena y llevártela contigo al trabajo, a la escuela, etc., y comer tan pronto como tengas hambre.
Algunos puntos son realmente sorprendentes. Después de todo, hasta ahora la gente creía que ciertos hábitos eran buenos para su salud. ¿Cuáles de los puntos mencionados forman parte de tu rutina diaria?
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