Si eres de los que creen que los gatos son interesados e indiferentes, piénsalo de nuevo. Hay un video que se volvió viral que demuestra con adorables hechos que los mininos también pueden preocuparse por sus amos y no sólo eso: ¡ofrecerles consuelo, amor y apoyo!
Todo sucedió cuando una pequeña niña japonesa se dio un golpe en el pie con una de las sillas de la casa. Como ocurre con los niños pequeños, la chiquilla se puso a llorar desconsolada, mientras la madre hacía un video del evento, e Hima no se hizo esperar.
Hima, una hermosa rusa azul, se acercó de inmediato a la niña y comenzó a consolarla. La gatita observó con mucha atención el llanto de la pequeña, aproximó su rostro al de la pequeña e incluso trató de acariciarla con sus patitas.
Una vez que la niña sabe que está recibiendo toda la atención necesaria, aprovecha el afecto de Hima para obtener consuelo. La dueña de Hima compartió el video en las redes sociales y la publicación no sólo obtuvo centenares de comentarios, también superó los 4 millones de vistas en Imgur.
Muchos usuarios compararon el afecto y la lealtad de Hima con el de sus propios gatos, asegurando que sus mascotas reaccionan de la misma forma en sus momentos de fragilidad y tristeza.
Algunos incluso se valieron de la dulzura de Hima para recalcar el amor que pueden profesar a sus amos muchos gatos, especialmente las hembras, que además pueden estar dotadas de un instinto maternal muy desarrollado en ciertos casos.
Esta tierna rusa azul ya tiene su propia cuenta de Instagram, en donde acumula a miles de seguidores. Allí podemos ver las travesuras de esta hermosa gata, que como muchos otros felinos, se ha convertido en toda una celebridad de las comunidades digitales.
También podemos notar que el afecto que Hima siente por la pequeña niña, no es nada nuevo. Ambas tienen muchas fotos juntas en las que se profesan un tierno amor.
Esta rusa azul forma parte de una raza de gatos que ha ganado mucha popularidad en los últimos años, especialmente en Asia. Estos animales se caracterizan por tener un carácter muy ecuánime, ser nobles, leales y cariñosos.
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