Una gatita enanita, y además, ciega, estaba resuelta a vivir, a pesar del peor acto de indiferencia, rechazo y desamor por parte de su propia familia: la dejaron a su suerte.
Existen seres que vienen al mundo con imperfecciones, pero esta historia demuestra que esos presuntos «defectos de fábrica» no determinan en lo absoluto la felicidad ni mucho menos las ganas de vivir. Lo mismo sucede con los animalitos de condiciones especiales, quienes con su lucha y tenacidad, nos pueden dar las mejores lecciones a los humanos.
Su nombre original era Giselle y cuando nació, los pronósticos eran los peores. Esta gatita vino al mundo con una malformación severa en la columna y en sus extremidades. Además, sufre de problemas respiratorios, debido a que su caja toráxica es muy estrecha y constriñe sus pulmones, y por si todo esto fuese poco, tiene enanismo y ceguera.
Nadie imaginaba que esta gatita discapacitada sería una caja de sorpresas
Sus dueños originales no confiaron en ella. No imaginaron que Giselle es realmente una luchadora y, al no saber cómo suministrarle las atenciones necesarias, la dejaron de inmediato en un centro de cuidados llamado Massachusetts Society for the Prevention of Cruelty to Animals (MSPCA).
Quienes supuestamente debían ofrecerle todo el amor fueron los más insensibles y decidieron no luchar por ella
Cuando los especialistas de MSPCA recibieron a Giselle, pensaron lo mismo que sus dueños: esta gatita no sobrevivirá. Su pelaje estaba completamente sucio y enmarañado y presentaba condiciones de salud muy frágiles.
Su vida pendía de un hilo
Alyssa Krieger, la gerente del refugio de animales, vio en Giselle algo especial. No solo era una gatita dispuesta a llevar una vida normal, también tenía una personalidad irresistible. Después de un corte de pelo y los cuidados necesarios, esta “pequeña gigante” estaba lista para encontrar un nuevo hogar.
Cuando Alyssa difundió en las redes sociales la noticia de que estaban buscando un buen hogar para Giselle, recibió cerca de 3.000 peticiones de adopción, de las cuales fue la propuesta de Holly la que resultó elegida.
Tenía ya una madre que la esperaba para rodearla de todo el respeto y la dedicación que desde siempre mereció:
¡Giselle había encontrado el hogar perfecto para ser feliz! Holly cambió su nombre a Potato y la presentó a sus tres hermanos gatunos: Jack, Lady y Little Sister, quienes la han recibido con un amor tremendo.
Sus pequeñas patitas y su ceguera no le impiden corretear a sus hermanos y juguetear con ellos; en su cuenta de Instagram, Potato ha conquistado el corazón de más de 156 mil personas, que pueden ver los videos de esta adorable gatita.
Su discapacidad no le impide ser feliz y ama su nueva vida
También comparte inolvidables momentos de amor con Holly, su dueña. Potato se aproxima a ella cuando llega la hora de recibir un poco de cariño y se echa sobre sus pies.
Sin pensarlo dos veces, Holly la toma entre sus brazos y le brinda todo el afecto y protección que necesita, pues sabe que sin importar su apariencia, todas las mascotas merecen ser amadas.
Es la enanita más dulce y tierna que se haya visto jamás
Potato es la protagonista de otra historia con final feliz. A pesar de haber nacido con todas las condiciones en su contra, pudo hallar el hogar perfecto para vivir con suma dicha.
Su anécdota sirve de motivación a otras personas, especialmente a aquellas que deciden adoptar a mascotas en condiciones especiales.
Comentarios