Este ecuatoriano, residente en Italia, lleva tres meses viviendo un auténtico calvario sin poder hacer vida normal
Un ecuatoriano ha dado positivo en coronavirus 15 veces en Italia. Milko Mieles, de 49 años, permanece aislado desde el 17 de abril sin poder salir ni ver a su familia. El paciente está totalmente desmoralizado y no puede soportar más esta desagradable situación que le está tocando vivir.
Desde mediados del mes de abril hasta ahora, este ecuatoriano residente en Linate, al norte de Italia, desde hace 20 años no para de dar positivo en las pruebas PCR. Según éstas, Milko Mieles es un paciente asintomático. Sin embargo, puede contagiar a otras personas por lo que permanece completamente aislado desde abril. Tres meses que se le están haciendo eternos porque no puede salir a la calle ni ver a su esposa e hijos y los echa mucho de menos.
El tiempo pasa lentamente aquí. En la mañana camino por el jardín durante cinco kilómetros, siempre solo… Luego leo las noticias por teléfono, veo televisión, hago videollamadas con mi esposa, que no he visto en tres meses, excepto a través de la pantalla del teléfono: la extraño mucho. Y también a mis hijos», ha expresado el paciente a los medios locales.
La depresión le ha invadido
Esta víctima del COVID-19 ha asegurado que ha estado llorando durante semanas y que incluso tuvo un colapso emocional. Todo ello debido a que aún no está libre del virus que ha asolado el mundo entero. Y es que resulta muy duro encontrarse bien y no poder continuar con su vida cerca de los suyos.
Milko Mieles ha mencionado que incluso tuvo que cancelar su cuenta de Facebook porque no podía soportar las constantes preguntas de la gente sobre su salud. La respuesta, por desgracia, siempre era la misma.
Por el momento, el paciente debe permanecer en un centro administrado por la Cruz Roja Italiana, donde se ha realizado el seguimiento de este curioso caso. Milko Mieles deberá esperar hasta que por fin la prueba de COVID-19 dé negativo. Entonces será el momento de olvidarse de estos meses de sufrimiento y volver a vivir de nuevo lejos del lugar que ha sido su casa durante estos últimos tiempos.
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