El 7 de abril del año 2007 la querida mascota de Joshua Edwards llamada Duke se esfumo. Su tan apreciado rottweiler se desapareció de su casa en la Florida, Estados Unidos, sin dejar rastro alguno.
Para aquel entonces, el perro tan solo contaba con 1 año de edad. Su dueño. Joshua se encontraba muy triste así que hizo todo lo que estuvo en sus manos para dar con el paradero del perrito. Pero mientras más iba pasando el tiempo, la situación se iba tornando más complicada y las esperanzas de Joshua se iban desapareciendo. Llego un momento donde no daban con el perrito y pensó que mas nunca lo iba a volver a ver.
El peor miedo por el que puede pasar una persona que tiene un perro como mascota es perder a su amigo fiel. Pero estos escenarios desafortunados le pueden pasar a cualquiera. El rottweiler de Joshua Edwards apenas iba a cumplir su primer año de vida cuando paso este hecho tan impensable. Su perro Duke se encontraba en el jardín de su casa, hasta que de repente desapareció y mas nunca se supo de él.
La llamada que traería de nuevo al rottweiler desaparecido a casa
Prácticamente Joshua había perdido todas las esperanzas de volver a ver a su apreciado perro nuevamente. Pero luego de pasar casi una década de que su rottweiler se desapareció recibió una llamada que le cambiaria la vida.
La llamada provenía de una clínica veterinaria, que milagrosamente, tenía buenas noticias sobre rottweiler desaparecido. Al parecer, Duke había vuelto y el personal de la clínica logro dar con su antiguo dueño, Joshua. Una mujer había visto al perro deambular por la calle completamente solo. Entonces tomo la mejor decisión y se puso en contacto con el personal de la clínica veterinaria. Una vez que lograron encontrar al perro, los trabajadores de la clínica rastrearon a Joshua con la ayuda de un microchip que portaba Duke.
Cuando Joshua recibió la llamada se encontraba totalmente sorprendido, estaba muy emocionado y no lo podía crear, por ello se planteo estar completamente seguro y no ilusionarse. Por ello la espera en el veterinario se le hizo eterna, estaba muy nervioso. En el momento que se abrió la puerta, Joshua trato de contener la respiración.
¡Y por supuesto que si era su amada mascota la que entro por la puerta! Joshua estallo de felicidad, y lo mejor de todo es que el perro logro conocer a su amo luego de haber pasado más de 7 años. “Yo creo que el sabia a primera impresión de quien se trataba. Jamás pensé que volvería a ver a Duke”, conto Joshua al Miami Herald.
El veterinario relato que anteriormente se habían presentado casos similares a este, pero que en estos casos las mascotas solo tenían algunas semanas desaparecidas o máximo semanas. Nada más con tratarse de 8 años lo hace un caso único. Pero gracias a la ayuda del microchip pudo ser posible. “Esto muestra que el sistema es eficiente”, comenta el veterinario al periódico.
Pero lo que nunca se pudo saber es donde estuvo Duke en todos esos años. Pero con saber de que ya pudo regresar a donde su dueño nos llena a todos de alegría. “Me gustaría que nos pudiera contar todo lo que paso. Al parecer las personas que se hicieron cargo de Duke en todos estos años lo hicieron muy bien, porque Duke se encontraba en perfecto estado cuando lo encontraron en la calle”, dice Joshua.
Este tipo de historias son las que nos alegran el día. Es increíble ver el verdadero amor que puede existir entre los humanos y los perros. Comparte esto con tus amigos para que ellos también puedan ser testigos de esta historia tan linda.
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