Si tienes debilidad por la cerveza, tenemos la receta ideal para ti. Si además eres dulcero, este pastel de cerveza va a robarte el corazón. ¡Y es todo un deleite para la vista! En pocos pasos tendrás sobre la mesa un jugoso pastel en forma de jarra de cerveza. ¡Parecerá que estás en el Oktoberfest!
Ingredientes:
- 4 huevos
- 350 g de azúcar
- 400 g de harina
- 1 paquete de polvo de hornear
- 240 ml de cerveza
- 200 ml de aceite
Para el glaseado:
- 250 g de queso crema
- 200 g de crema (nata)
- 3 cucharadas de azúcar en polvo
- 2 paquetes de estabilizante para crema (nata)
- Colorante alimentario amarillo
Además:
- 4 moldes para horno (diámetro: aproximadamente 11 cm)
- 2 palillos de dientes
- Manga pastelera
- Brezel para el asa
Preparación:
1. Mezcla los huevos con el azúcar en un bol y bátelos hasta que queden espumosos. Mezcla harina con polvo de hornear, y añádelos a la mezcla espumosa. Añade cerveza y aceite, y mezcla todo hasta que quede homogéneo.
2. Engrasa y enharina los 4 moldes para horno y reparte la masa en ellos. Hornea los moldes a 180 °C con el calor superior e inferior activados de 25 a 30 minutos. Deja los pasteles enfriar y córtales una "tapa" a 3 de ellos.
3. Ahora prepara el glaseado. Mezcla el queso crema con el azúcar en polvo. Mezcla la crema (nata) con el estabilizante y bate. Añade la crema (nata) al queso crema. Echa 1/3 del queso crema en otro bol y colorea con colorante alimentario amarillo. Refrigera la crema durante 1 hora aproximadamente.
4. Ahora viene la hora de ensamblar el pastel. Reparte la crema sobre los 3 pasteles sin tapa y apílalos unos sobre otros. El pastel sin tapa será el último sobre la "torre".
5. Rodea el pastel completamente con el queso crema blanco y refrigera durante unos 30 minutos (nota: al final necesitarás un poco del queso crema para la "espuma").
6. A continuación, unta la pared del pastel por completo con el queso crema amarillo. Finalmente, haz pequeños huecos verticales en la crema, de forma que el pastel tenga la forma de una jarra de cerveza.
7. Llena una manga pastelera con boquilla simple con el resto del queso crema blanco. Reparte la crema generosamente por la parte superior del pastel de forma que parezca la espuma de la cerveza.
8. Parte un brezel por la mitad y clávalo como asa de la jarra de cerveza con ayuda de dos palillos de dientes. ¡Ya está lista tu jarra comestible de cerveza!
Este pastel para cerveceros es algo verdaderamente único. ¡No lo dejes escapar!
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