Un cordón de la Policía Nacional tuvo que intervenir ayer para evitar que un grupo de jóvenes de extrema izquierda boicoteara la protesta contra Pedro Sánchez
Un cordón de la Policía Nacional tuvo que intervenir ayer lunes 18 de mayo para evitar que un grupo de jóvenes de extrema izquierda reventara la cacerolada contra Pedro Sánchez que tiene lugar desde hace varios días en la Plaza de los Príncipes del Parque Lisboa de Alcorcón.
En las imágenes se puede ver cómo varios agentes se colocan entre el grupo habitual de manifestantes, que portan banderas de España, y alrededor de 60 jóvenes que se autodefinen como "antifascistas", algunos de ellos portando la bandera republicana y que no están guardando la distancia de seguridad.
Los vecinos aseguran que se concentraron de forma pacífica y que de repente aparecieron unos 60 antifascistas que empezaron a insultar a los reunidos que llevaban la bandera de España y que pedían la dimisión de Sánchez. "Nos han empezado a provocar, a llamarnos de todo y a decirnos fachas y fascistas. Nos pedían además que nos fuéramos del barrio, que no querían fascistas en Alcorcón", explica un vecino. "A mi me gritaron Gora Eta también y me provocaban casi en mi cara, menos mal que vino la Policía ya que la gente estaba empezando a encararse con ellos", señaló otro persona. "Nosotos gritamos nuestras consignas y ellos nos insultaban y nos descalificaban llamándonos guarros y voxeros", cuenta otro residente que asegura que todos los radicales fumaban porros y bebían cervezas delante de los agentes.
Esta mañana, el teniente de alcalde y portavoz de Unidas Podemos en Alcorcón, Jesús Santos, ha dicho que las caceroladas de los últimos días en el barrio de Parque Lisboa "rompieron el consenso" de usar la vía pública con responsabilidad "y por eso tienen respuesta", justificando así la contraprotesta.
"El uso de la vía pública es un derecho de todos, no el privilegio de unos pocos. Colectivamente, habíamos alcanzado el consenso de usarla con responsabilidad para vencer al virus, pero la extrema derecha lo ha roto con sus convocatorias. Por eso, hay gente que responde", insiste Santos en su cuenta de Twitter, informa Efe.
El portavoz de Unidas Podemos afirma que "fue la extrema derecha, mediática, política e institucional, con (la presidenta del Comunidad de Madrid, Isabel Díaz-) Ayuso al frente, la que ha convertido una lucha colectiva en un desafío a la salud".
"Si una parte se siente con el privilegio de ocupar la vía pública, ¿con qué legitimidad se le pide a quien responde que no lo haga?", añade el portavoz.
"Si las caceroladas cesan y se hace un uso responsable de la vía pública, volveremos al compromiso común de una región que sigue en la fase 0. En la que, por cierto, seguiremos mucho más tiempo a este ritmo", ha añadido el también portavoz de Podemos Comunidad de Madrid.
Por su parte, el PP de Alcorcón, que gobernó el municipio hasta junio de 2019, también se ha pronunciado en las redes sociales y ha agradecido a la Policía Nacional que "protegiera a los vecinos frente el grupo radical que ha acudido a reventar su protesta pacífica".
El consejero de Vivienda y Administración Local, David Pérez (PP), ex alcalde de Alcorcón, expresó el lunes su apoyo a las caceroladas contra el Gobierno central que se han extendido en los últimos días al municipio, con el barrio de Parque Lisboa como epicentro de las protestas.
También Vox Alcorcón ha mostrado a través de sus redes sociales su indignación ante las "amenazas" de la "extrema izquierda" a "las familias que salen a la calle libremente a protestar contra el Gobierno".
"Desde Vox denunciamos de la manera más enérgica y firme este tipo de actos y denunciamos que desde las altas esferas de este gobierno, cada vez menos social y más comunista, no sólo se permitan, sino que se justifiquen e incluso se alienten", señala el portavoz de Vox, Pedro Moreno.
Moreno exige una condena de lo ocurrido este lunes "por parte de todos los grupos a los que se les llena la boca cuando hablan de democracia pero que callan y agachan la cabeza cuando ésta es atacada".
Los grupos antifascistas han vuelto hoy a convocar una contra-reunión hoy martes en Alcorcón para frenar la "oleada fascista" por lo que la Policía Nacional y Municipal van a establecer de nuevo un dispositivo de seguridad para evitar incidentes.
Las concentraciones y caceroladas en diferentes puntos de Madrid continuaron ayer por noveno día consecutivo rodeadas de un amplio dispositivo policial desplegado por la Delegación del Gobierno que se mantendrá en los próximos días para vigilar el cumplimiento de las medidas de seguridad por el coronavirus.
Gritos de "libertad" y "Gobierno dimisión" han sido las proclamas en todas estas concentraciones, en las que los agentes han pedido a los asistentes que mantuvieran las medidas de distanciamiento y que no cortaran el tráfico de las calzadas.
Núñez de Balboa, en el distrito de Salamanca, epicentro de las protestas los primeros días, ha contado con más de una decena de vehículos policiales y un helicóptero sobrevolando la zona.
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