Con el objetivo de salvar la vida a su hermana, este hombre decidió cambiar por completo su estilo de vida
Jonathan Coronado siempre se consideró una “persona grande”, sin embargo nunca se sintió motivado a perder peso, hasta que se enteró que su pequeña hermana Denise de tan solo 13 años, necesitaba su ayuda para poder sobrevivir.
Denise había sido diagnosticada con un trastorno sanguíneo llamado Púrpura de Henoch-Schonlein, el cual se caracteriza por inflamar los vasos sanguíneos de los intestinos y riñones, ocasionando que estos funcionen de forma incorrecta. Por lo tanto, duró aproximadamente cuatro años recibiendo diálisis, según informa el diario Today.
Cuando lo médicos descubrieron que la única manera de salvar la vida de la joven era a través de un trasplante de riñón, Jonathan sería su opción más viable, sin embargo tenía tanto sobrepeso (165 kilos) que los médicos ni siquiera podían considerarlo.
Te recomendamos: 4 tipos de sopas que depuran el hígado y los riñones en 2 semanas
“Nunca me miraría en el espejo. Tomamos una foto en mi boda y mi esposa la publicó en Facebook y me molestó porque ella la publicó… No sabía que era tan grande”, comentó el joven mecánico de 31 años al medio digital.
La motivación por ayudar a su hermana lo hizo embarcarse en un viaje que ni siquiera se había imaginado, determinado a ser el donante para Denise comenzó a mirar lo que comía y evitó alimentos dañinos como refrescos, pan o galletas.
“Aprendí a medida que avanzaba”, comentó. “Cuanto más perdía peso, más confianza tenía y más entrenamientos. Las dietas se convirtieron en un hábito”.
Coronado empezó a incluir ejercicios en su rutina diaria, al principio solo caminaba por el parque, pero poco a poco logró perder 45 kilos. Aunque este fue su objetivo al principio, cuando vio que podía lograr mucho más continuó esforzándose.
“Sentí que necesitaba perder más, así que simplemente reajusté mi dieta y mi consumo de calorías”, recordó.
El hombre fue incorporando las pesas en sus ejercicios además de realizar actividad cardiovascular, la comida chatarra la cambio por comida casera saludable y así perdió 27 kilos más. Pero no era suficiente para calificar como donante de su hermana.
“Bajé hasta las 88 kilos y fue entonces cuando fui elegible para la donación”, puntualizó Coronado.
Finalmente Denise obtuvo el trasplante de riñón el 10 de septiembre de 2018 y aunque Jonathan regresó a casa al día siguiente la recuperación de la joven fue un poco más lenta. Una situación que no le impidió ganar una beca debido a sus excelentes calificaciones.
“Fue un cambio de vida para ella. Ella comenzó a ser más feliz. Está empezando a salir y divertirse y hacer las cosas que no podía hacer cuando estaba en diálisis … Me alegra verla de esa manera”, comenta Coronado.
Si bien su hermana se convirtió en la principal motivación para perder peso, Jonathan se siente orgulloso de haber dejado atrás todos esos kilos de más que solamente podrían afectar su salud, “Tienes que querer hacerlo si quieres perder peso”, comentó y de hecho ahora se mantiene con 88 kilos.
Es tendencia: Trastorno bipolar II, la enfermedad que atormenta a Catherine Zeta Jones
Comentarios