Todo niño sueña con tener una casa-árbol. Un lugar mágico, sin padres, donde puedan pasar las horas soñando con lo que les gusta. Esta niña tenía también ese sueño, pero en este caso sus deseos fueron órdenes para su padre. El resultado de su trabajo lo publicó en Imgur.
"Mi hija quería un fuerte mágico dentro de su cuarto en el que pudiera sentarse a leer. Quería subir por sus ramas y sentarse sobre ellas", cuenta el padre, que trabaja en el sector de los videojuegos y tiene un espíritu muy creativo. Esta es una fotografía de su cuarto antes. Algo aburrido, ¿no?
Todo comenzó con un boceto a grandes rasgos. El padre no tenía ni idea de en lo que se convertiría en los próximos meses. Al final hacer el árbol le costó unos 4.500$ y le llevó 350 horas de trabajo; 15 días si lo hubiera hecho de seguido.
Pero como tenía que seguir con su trabajo habitual, solo podía dedicarse al proyecto por las tardes o los fines de semana. Este le llevó casi 18 meses. Tras sus primeros bocetos, construyó un modelo en miniatura a escala 1:12. Después de todo, tenía que planear meticulosamente cómo convertir el sueño de su hija en realidad.
Todo tenía que estar bien marcado en el suelo y las paredes. No es tan sencillo cuando es a tamaño natural.
Entonces llegó la parte difícil: construir un esqueleto de hierro. Primero el padre tuvo que hacer un curso de soldador. Puesto que su hija quería trepar por las ramas, estas tenían que ser muy sólidas. Él mismo probó cada una de las ramas colgándose de estas para que nada saliera mal.
A continuación, cubrió el esqueleto con una malla fina de cable para que el futuro árbol tuviera algo a lo que agarrarse. Papá ya había pasado más de 100 horas trabajando en el árbol.
La primera parte del tronco fue una enorme capa de hormigón. Preguntó a un experto en seguridad contra incendios cuáles eran los mejores materiales, porque no quería nada altamente inflamable en el cuarto de su hija.
Las ramas más altas las cubrió con papel maché. Y, por fin, el árbol estaba listo para pintarse.
El árbol fue hecho con una textura lo más parecida a la realidad. Y aún queda por construir.
Varios miles de dólares y de gotas de sudor después, el árbol ya es una realidad. ¿Ves lo feliz que se ve, en su linda cueva verde?
Bajo sus ramas se esconden muchas sorpresas, como algunos pájaros que ya han encontrado su hogar.
Y, por supuesto, mariposas: son necesarias en un mundo de fantasía.
Aunque no hay hadas de verdad tras estas diminutas puertas, su cálida luz les proporciona una sensación mágica.
Cientos de luces decoran las ramas como relucientes estrellas. ¿Hay algo que este árbol no tenga?
Y la prueba final: ¡su hija puede sentarse en el árbol! Este feliz rostro es recompensa suficiente para este creativo papá.
El fuerte mágico ya está completo. Este papi debe haber sido recompensado con besos y abrazos suficientes.
Si hubiera un concurso a padre del año, este hombre lo ganaría por goleada. Los encantadores detalles que se esconden entre las ramas son el deleite de todo el que lo ve. Pero papá tiene un temor: "cuando cumpla 13 años, ya no querrá más árbol". Yo espero gustosa a ese día. ¡Entonces podré meterlo en mi cuarto!
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