Bryan Johnson es un nombre célebre en la escena empresarial actual. Aunque cuenta con una fortuna estimada en miles de millones de dólares, este magnate se ha vuelto más conocido por sus excentricidades, sobre todo en lo que se refiere al cuidado personal. Se estima que gasta varios millones de dólares al año para mantenerse joven.
Johnson hizo su fortuna como fundador de Braintree, una empresa web y de pagos móviles que luego se vendió a PayPal.
Sin embargo, hoy en día es más conocido por gastar al menos dos millones de dólares al año persiguiendo la fuente de la juventud junto a un equipo de 30 doctores.
Según varios reportes, la empresa más reciente de Johnson, Project Blueprint, consiste en hacer todo lo posible para revertir el proceso de envejecimiento. Esto incluye seguir pautas dietéticas estrictas, un horario rígido para dormir y hacer ejercicio, y realizarse exámenes médicos frecuentes, siguiendo los consejos de un médico de 29 años que terminó la carrera de medicina justo antes de la pandemia.
Además de ese estricto régimen, parece que su búsqueda de la juventud ahora también incluye infusiones de “sangre joven”, una práctica que hasta ahora no ha sido probada científicamente y que la Asociación de Alimentos y Medicinas de los Estados Unidos no recomienda.
Algunos estudios en roedores han sugerido que los ratones más viejos que comparten sangre y órganos con sus contrapartes más jóvenes pueden experimentar un efecto de envejecimiento inverso, aunque estos estudios también son controversiales. No hay evidencia que sugiera que tal intercambio funcione en humanos, y los investigadores consideran que la práctica podría tener efectos secundarios peligrosos, como una fuerte reacción inmunológica.
De acuerdo con una de las últimas publicaciones del magnate en su Instagram, él ha completado lo que llama “el primer intercambio de plasma multigeneracional del mundo” y ha intercambiado sangre con su hijo y con su padre, con lo que trata de comprobar la teoría del envejecimiento inverso.
“Una vez divididos por la mente, ahora unidos por la biología”, agregó en la publicación.
Según lo que ha compartido el propio Johnson, su proyecto Blueprint ha evaluado cientos de terapias de longevidad y se ha determinado que el intercambio de plasma puede servir para evitar el envejecimiento.
El plan de Johnson, que actualmente cuenta con 45 años, es donarle su plasma más joven a su padre de 70 años, mientras él recibe el plasma de su hijo de 17 años. Este intercambio, según él, les dará varios beneficios para la salud, aunque ninguno ha sido totalmente comprobado por las autoridades médicas, que siguen sin recomendar el procedimiento.
La cantidad de sangre que se le extrajo al hijo fue de un litro, aproximadamente una quinta parte de la sangre de todo su cuerpo, y la separaron en partes antes de inyectarle el plasma a su padre.
Bryan Johnson luego le donó un litro de productos sanguíneos a su padre de 70 años, aunque en este intercambio nadie le donó sangre al joven de 17 años.
Como parte adicional de su estilo de vida, Johnson vive de acuerdo con un régimen que se parece más a un trabajo de tiempo completo. Le han limpiado el suelo pélvico con pulsos electromagnéticos para mejorar su tono muscular en lugares de difícil acceso, y usa anteojos que bloquean la luz azul durante dos horas antes de irse a dormir a la misma hora todos los días.
Afirma ingerir exactamente 1977 calorías al día, lo que garantiza que sus niveles de grasa corporal se mantengan entre el 5 y el 6 por ciento. Johnson dice que su objetivo es asegurarse de que su cerebro, su hígado, sus riñones, sus dientes, su piel, su cabello, su pene y su recto funcionen como cuando tenía 18 años.
Este estilo de vida y la obsesión por tratar de socavar los efectos del tiempo han recibido importantes críticas, y algunos expertos médicos dicen que esta es solo una manifestación de su ansiedad por la mortalidad.
Los esfuerzos de Bryan Johnson por mantenerse joven son un testimonio de su mentalidad emprendedora y su dedicación a la hora de desafiar los límites establecidos. A través de su empresa Kernel, está explorando nuevas fronteras en la interfaz cerebro-máquina y en la neurociencia, con la esperanza de desbloquear los secretos del envejecimiento y proporcionar soluciones revolucionarias para mejorar la salud y el bienestar.
Permanecer siempre joven es un sueño que parece que solo está al alcance de los personajes de la literatura o el cine; sin embargo, hay varios famosos para los que el tiempo no parece transcurrir, como Tom Cruise, Paul Rudd y Jared Leto.
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