No siempre el hecho de conseguir buenas calificaciones en el transcurso de tu carrera estudiantil significa que tendrás miles de puertas abiertas en el ámbito laboral.
Esta docente, escritora e investigadora lo experimento de primera mano, ya que en el transcurso de su doctorado se dio cuenta que ya no iba a poder cubrir con los gastos de alquiler, comida y consumo diario, puesto que sus ingresos era muy limitados.
“Me di cuenta que no iba a poder cancelar el mes de alquiler y que iban a terminar corriéndome del piso”.
Aimée lê impulsaba a sus alumnos a apreciar y valorar cada esfuerzo que hacían para crecer como personas. Les daba cátedra de la difícil situación económica que golpeaba al país y los ayudaba a no perder las esperanzas.
Estudien, pero sobre todo hagan las cosas con amor, al principio tal vez no sea muy fácil llegar hasta donde ustedes sueñan pero con perseverancia y dedicación pueden llegar muy lejos”.
Los alumnos jamás se imaginaron que su profesora llevaba 2 años viviendo en la calle, en una tienda de campaña.
“Al principio fue muy duro, tenía miedo, me sentía sola y desprotegida pero al cabo de unas semanas me acostumbre a vivir así».
Lê dejaba todos los libros del doctorado en una biblioteca cerca de donde tenía su tienda de campaña para que no se les dañara y aprovechaba las duchas del campo universitario para bañarse todas las mañanas.
Yo tenia fácil acceso a toda la institución, llegaba en la madrugada para que nadie me viera bañarme ahí”.
Su historia llego a las redes sociales y se hizo viral inmediatamente, muchos docentes empatizaban con la joven docente ya que entienden perfectamente la situación.
“Pase noches heladas, cuando salía de la tienda veía que la carpa estaba cubierta de nieve”.
Los padres de Lê nunca supieron todo el esfuerzo que su hija hizo durante tanto tiempo para no preocuparlos.
“Ellos sabían que ya no tenía el piso pero les dije que estaba en una granja de acogida y que estaba muy bien allí”.
Era como una doble vida, por un lado era una grandiosa profesional, excelente docente pero por otro lado vivía en las calles como una indigente.
Si bien Lê pudo terminar su doctorado, en el ámbito laboral no hubo mucho cambio, actualmente se encuentra desempleada pero se regreso a vivir en casa de sus papás. Ha dejado su hoja de vida en distintas instituciones y se mantiene a la espera de respuestas satisfactorias.
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