Si nunca has escuchado hablar sobre los Bunchems, son unos pelotitas pegajosas cubiertas con unas púas suaves igual de pegajosas que pueden moldearse juntas para crear diferentes formas y criaturas, algo parecido a trabajar con arcilla. Si te cuesta imaginar algo como eso, piensa en una pelota Koosh (¿las recuerdas?) del tamaño de una pelota de goma pequeña y con la consistencia de esas manos pegajosas que a los niños les encanta lanzar contra las paredes y las ventanas.
Ahora bien, si alguna vez te has topado con alguna de estas manos pegajosas, sabrás que se pegan a todo y recogen cualquier cosa con la que se crucen. Tierra, mugre, cabello; lo que sea, se quedan pegadas a eso. Y ni siquiera mencionaremos las marcas que dejan en las ventanas. Al ya saber esto, no debería ser una sorpresa que los Bunchems sean objeto de crítica porque son, como ya dijimos, pegajosos.
Justo después de las navidades de 2018, una madre de Alaska descubrió que su hijo, Collin, le había lanzado todo un contenedor de Bunchems a su prima Scarlett sobre su cabeza. La caja dice claramente que el producto debe mantenerse alejado del cabello, pero el problema con los primos mala conducta de tres años de edad (uno de ellos, en verdad) es que no saben leer.
Scarlett reaccionó sacudiéndose, intentando deshacerse de los juguetes que estaban en su cabeza. ¿El resultado? Cincuenta Bunchems se adhirieron a los una vez hermosos bucles de Scarlett y se creó un enredo de tal magnitud que muchas madres habrían buscado las tijeras.
Para salvar el amado cabello -y evitar un corte de cabello tipo militar-, la madre de Scarlett, Jasmine Nikunen, pasó los siguientes dos días resolviendo el enredo en el cabello de su hija. Dijo que hicieron falta doce horas y media y tres pares de manos para sacar finalmente los juguetes de ahí. Publicó la situación en Facebook buscando consejo, solo para descubrir que no era la única mamá que había experimentado este suplicio.
Las reseñas online y las publicaciones en Facebook en todo el país las han hecho padres y tutores advirtiendo a los demás sobre los peligros de los Bunchems. Un usuario incluso dijo que sabía que había que mantener el producto lejos del cabello, pero cuando su hija diseñó un collar y se lo puso alrededor del cuello, lo que siguió fue caos.
La mayoría de las madres comentaba que ni siquiera había que molestarse con horas de usar spray para desenredar, aceite de oliva y otros productos conocidos para sacar goma del cabello. Estos chicos están usando nuevos cortes de cabello más cortos o simplemente les cortaron esas secciones. Echa un vistazo al video a continuación:
Difunde el mensaje: ¡Compradores (y padres de niños con cabello largo), tengan cuidado! Aunque los Bunchems pueden ser divertidos y despertar la creatividad de los niños, debes vigilarlos de cerca cuando juegan y tal vez amarrarles el cabello en un apretado moño como una medida de seguridad. Cuéntanos qué opinas y dinos tu experiencia en la sección de comentarios. ¡Difunde el mensaje para crear conciencia sobre este tema!
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