Después de ser rescatados, comienza una nueva etapa para los perros. Lo peor ha pasado, pero todavía queda trabajo por hacer. El objetivo es salir del centro de rescate con una familia que les quiera. Ser adoptado para poder llevar una vida de cariño y respeto.
Después de que Carpe Diem, un chihuahua, llegara al centro Cuidado y Control de Animales de San Francisco (SFACC) comenzaron los pasos que se siguen tantas otras veces con otros perritos.
Normalmente, los animales que llegan a este centro de encuentran asilo pronto. El amor por los animales de las personas en esta ciudad estadounidense los salva y los saca de allí. Es muy común que en los centros de animales se hagan sesiones de fotos para difundir el perfil del nuevo miembro del centro y agilizar así la adopción. Bonitas fotos de revista, con estudiadas poses que enamorarían a cualquiera.
Con Carpe Diem todo salió distinto. Su espontaneidad hizo que el resultado de la sesión fuera tan diferente que sorprendió a todos y demostró que la naturalidad es la mejor aliada cuando se trata de posar. Quizá no es lo que esperaban, pero ¡no me negaréis que las fotos no tienen desperdicio!
Deb Campbell, una representante del centro de Cuidado y Control de Animales de San Francisco, dijo que Carpe Diem no era un pequeño perrito asustadizo y tembloroso, sino que era muy inteligente. “Es muy expresivo y siempre está contento y feliz con todo lo que ve a su alrededor”.
Desde luego, el nombre Carpe Diem (vive el momento) le viene a la perfección a esta mascota que sabe como vivir y aprovechar los días.
Con estas fotos tan graciosas del chihuahua se hizo inevitable el hashtag #MyWeirdDog, que no quiere decir otra cosa que ‘mi extraño perro’, justamente como es Carpe Diem.
Las fotos tuvieron tanto éxito que el tweet que anunciaba la adopción de Carpe Diem se ha compartido ya 757 veces y le gusta a 1.700 personas. Los amantes de los animales saben lo que quieren: optimismo, felicidad y ganas de hacer el tonto. Justo como el protagonista de esta extraña sesión de fotos.
Tanto es así que Carpe Diem ya ha sido adoptado. Gracias a su encanto y personalidad, su paso por el centro de Cuidados y Control de Animales ha sido muy corto.
Es normal, ¿quién iba a resistirse a esos ojos y esas muecas tan divertidas? Imposible no caer rendido a los pies de este ídolo de las sesiones fotográficas.
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