El patinete eléctrico se vuelve a cobrar una víctima mortal más
El patinete eléctrico ha vuelto a ser el causante del fallecimiento de una mujer de 78 años en la provincia de Lleida. El pasado martes 21 de septiembre, la víctima fue arrollada y rápidamente llevada al hospital donde, desgraciadamente, ha muerto.
No es el único accidente de estas características que termina con la vida de un peatón. Este vehículo ya ha ocasionado numerosos atropellos con fatales desenlaces. Aunque la normativa es clara, todavía hay quien no hace caso a las normas de circulación siendo un auténtico peligro para todos.
La velocidad que alcanzan los patinetes eléctricos, así como el lugar por donde circulan elevan las probabilidades de sufrir un accidente. El riesgo alcanza tanto a los ciudadanos de a pie como a los propios conductores de patinetes que puede terminar siendo embestidos por los coches.
Muere una mujer tras ser atropellada por un patinete eléctrico
Todo ocurrió a las 12:52 horas del martes. La mujer se disponía a cruzar el carril bici situado en la Avenida Cataluña cuando el conductor del patinete la arrolló. Tanto la mujer como el conductor del vehículo cayeron al suelo resultando heridos.
Hasta el lugar de los hechos se trasladaron unas cuantas patrullas de la Guardia Urbana y tres ambulancias del Sistema de Emergencias Médicas. Rápidamente, ambos fueron trasladados al Hospital Arnau de Vilanova con heridas graves.
La mujer se había golpeado la cabeza y falleció el miércoles 22 de septiembre como consecuencia del golpe. La vida del joven no corre peligro y se recupera de las heridas sufridas en la caída.
No se trata de un caso aislado
El patinete eléctrico se está convirtiendo en una auténtica amenaza para los viandantes. No son pocas las ocasiones en que este tipo de vehículos circulan por las calles a toda velocidad sorteando al resto de ciudadanos.
Niños y adultos usan este tipo de patinetes para trasladarse hasta los lugares incumpliendo, en la mayoría de ocasiones, las normas de circulación. Un incumplimiento que ya se ha cobrado la vida de varias personas.
Sin ir más lejos, el pasado mes de julio, un coche colisionó frontalmente con otro para evitar chocarse con un conductor de patinete eléctrico. La maniobra provocó la muerte de una mujer de 70 años que conducía el otro vehículo.
También se han registrado casos donde los propios conductores de estos vehículos de movilidad personal han fallecido tras un accidente mientras circulaban.
En agosto, un niño de tan solo 15 años perdía la vida en Mijas. Una llamada alertó de que el menor estaba tirado en la calle y los servicios sanitarios se desplazaron hasta el lugar. El joven fue trasladado al hospital, pero nada pudieron hacer por salvarle la vida.
Lo mismo le ocurrió a otro chico de 25 años que perdió la vida tras chocar contra un taxi mientras iba en patinete eléctrico.
En los últimos tiempos, el uso del patinete está más extendido y, cuánto más crece, más se elevan los accidentes. Solo en la provincia de Barcelona, este tipo de siniestros han aumentado un 80%.
Una normativa más estricta
Como consecuencia del incremento del uso del patinete eléctrico entre la población, la Dirección General de Tráfico se ha mostrado implacable. Hubo un tiempo en que este tipo de vehículos no tenían una regulación específica, sin embargo, los últimos acontecimientos, han obligado a su reglamentación.
Desde el 2020 se considera como vehículo y no pueden circular a más de 25 km/h. Tampoco puede usar las aceras ni las zonas peatonales.
A principios de 2021 entró en vigor una primera reforma legal para los patinetes eléctricos, pero solo a nivel estatal. El resto de cuestiones como la edad para conducirlos, continua en manos de los municipios existiendo normativas diferentes según el lugar.
Lo que sí se quiere extender por todo el territorio nacional es la obligatoriedad de usar el casco.
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