Una familia de la provincia de Yunnan, China, crió por dos años a un oso, creyendo que era un perro de raza mastiff tibetano, un canino que es admirado por su gran tamaño y prominente pelaje.
La familia Yun, tomó la decisión de comprar un perro mastiff tibetano, pero fueron estafados. En lugar de recibir la mascota que querían, obtuvieron un oso negro asiático.
Mastiff tibetano
Oso negro asiático
La primera en notar algo distinto en su perro, fue la madre de la familia, quien no podía creer lo mucho que comía su nueva mascota.
“Comía una caja de fruta y dos cubos de fideos cada día (…) cuanto más crecía, más parecía un oso. Y tengo un poco de miedo de los osos”, mencionó la mujer.
Además, las sospechas de la familia aumentaron, por la facilidad que tenía su mastiff tibetano para caminar en dos patas.
Luego de que la familia informara a las autoridades sobre las sospechas de que su perro era en realidad un oso, el Centro de Rescate de Animales Salvajes de Yunnan, rescató al animal, para llevarlo a su entorno natural el 14 de mayo de 2018
En la actualidad, el oso ya es un adulto joven que pesa aproximadamente 113 kg y que está siendo vigilado por las autoridades, ya que estas bestias están en peligro de extinción.
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