Por desgracia, aún hay gente que considera que los animales son atracciones que pueden utilizar como reclamo para ganar dinero en negocios de dudosa moral. En este caso, el pequeño león llamado magnus, pasó su infancia alimentado sólo con yogur y pan para ralentizar su crecimiento.
Obviamente, un león no puede tener esa alimentación y por eso desarolló estenósis del esófag, impidiéndole una ingesta normal de alimentos.
Al enfermar, el león ya no era útil para el dueño de este circo, por lo que lo llevó a un veterinario con el fin de que le aplicaran la eutanasia y deshacerse de la carga en la que el pobre animal se había convertido para él.
Por suerte, en este punto la asociación Let's Adopt Global tuvo conocimiento del caso y se hizo cargo del león, cuidándole y practicándole la cirugía necesaria para recuperarlo. Ahora queda una parte no menos difícil: encontrarle un hogar adecuado. Por suerte, un grupo de personas se ha preocupado de que el final de Magnus no fuera trágico y prematuro como parecía que iba a ser.
Podéis ver un video sobre la operación practicada a Magnus pinchando aquí.
Esperamos que compartiendo noticias como esta, la gente se conciencie de que los animales no son un objeto con el que divertirnos ni servir como reclamo para turistas, sino seres maravillosos con los que compartimos hogar y a los que debemos cuidar y respetar.
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