El ministro de Sanidad insiste en que no se puede levantar el estado de alarma porque "mejor no hacer experimentos que nos puedan llevar al caos"
El Gobierno no se mueve de su posición sobre la prolongación del estado de alarma. Pese a que por primera vez la autorización del Congreso no está garantizada, por el rechazo del PP, PNV y ERC a alargar más esta situación, que proporciona al Ejecutivo poderes extraordinarios, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha insistido esta mañana en que es "imprescindible" para llevar a cabo la desescalada.
Después de que el 14 de marzo el Ejecutivo aprobó el estado de alarma, que limitó la movilidad y la actividad económica y confinó a los españoles en sus casas, hoy se inicia el proceso de transición para recuperar la normalidad a través de varias fases. En una comparecencia en La Moncloa, Illa ha asegurado a quienes piden su levantamiento que "no hay alternativa" y que "mejor no hacer experimentos que nos pueden llevar al caos".
Como ya apuntó el sábado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el Ejecutivo insiste en que ninguna fórmula legal puede amparar la restricción de la libre circulación o las ayudas extraordinarias por el Estado por los efectos económicos y sociales de la pandemia. El ministro de Transportes, José Luis Ábalos, también secretario de Organización del PSOE, se ha dirigido directamente al PP, cuyo apoyo puede resultar crucial si otros grupos como PNV o ERC -socios parlamentarios de Sánchez- no lo respaldan, y ha asegurado que si no votan a favor de una nueva prórroga "tendrán que responder ante los ciudadanos si se produce un repunte de casos". "Solo podemos pedir y esperar de los partidos que actúen con responsabilidad", ha destacado.
Sánchez ha mantenido hoy contactos con Pablo Casado y, según ha relatado Ábalos, la conversación se ha prolongado una hora pero sin ningún acercamiento porque la sensación del Gobierno, ha dicho, es que van a votar en contra de mantener el estado de alarma. En línea con Illa, el número tres del PSOE ha alertado de que esto produciría un caos sanitario y económico.
Ábalos ha asegurado que no cree que el PP "vaya de farol" porque "son momentos muy duros como para plantear esto como una jugada política". Y ha instado a este partido a que "si tienen alguna alternativa mejor que la exponga, no lo hacen porque no la hay".
LEALTAD INSTITUCIONAL
El ministro ha considerado que una fuerza como el PP no se puede no abstener porque "gobiernan en varias comunidades". "Este Gobierno no ha asumido la gestìón de la sanidad de ninguna autonomía". La crisis del coronavirus, ha señalado, se ha afrontado desde la "corresponsabilidad" y la lealtad institucional. Y se necesita este instrumento jurídico porque las comunidades "no pueden tomar" decisiones para controlar la movilidad, que restringe un derecho fundamental y sólo ha sido posible aplicar por la excepcionalidad del estado de alarma. "Se necesita", también las autonomías, ha repetido Ábalos, porque no hay "fronteras interiores".
Los dos ministros han coincidido en argumentar que si la la emergencia sanitaria del Covid-19 sigue vigente no hay ningún motivo para renunciar a esta herramienta y que se debe mantener para actuar ante un rebrote de contagios. "Si perdemos este instrumento constitucional nos abocamos a un caos sanitario", ha reiterado Illa.
El estado de alarma, según Ábalos, no ha obedecido a un "capricho" del Ejecutivo sino a una "situación de emergencia sanitaria", para proteger la vida de los españoles. Que ha sido eficaz para evitar la propagación del virus y que han adoptado otros países. Se urgía al Gobierno a aprobarla, ha recordado en referencia al PP, para garantizar el distanciamiento social y la coordinación en la lucha contra la pandemia y fue "bien recibida por los agentes sociales".
El Gobierno argumenta además que todas las ayudas habilitadas para hacer frente a las consecuencias del coronavirus han sido posibles baja el paraguas del estado de alarma y la razón de "causa mayor". Todo este decaería, ha advertido el ministro de Transportes.
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