En Wisconsin, como en España, se utilizan trampas para atrapar a todo tipo de pequeños y medianos animales salvajes. La razón pasa tanto por fines cinegéticos como lúdicos. Aunque cueste creerlo, para muchos la caza es un mero deporte.
Como en la pesca, muchas veces se termina por atrapar a animales que no eran necesariamente el objetivo inicial de dichas prácticas, y que sufren las consecuencias de una actividad tan extendida como discutible.
Las heridas que causan, y el sufrimiento, a la fauna salvaje en inimaginable. A veces mueren de inanición al no poder librarse de la trampa, otras por las graves laceraciones sufridas, etc.
En el siguiente vídeo vemos otra consecuencia de todo lo denunciado en líneas anteriores. Un precioso ejemplar de lobo con una pata atrapada en un cepo.
Está visiblemente asustado y nervioso, pero lo que no se espera es que aquellas personas que no paran de mirarle y moverse alrededor de él no están para hacerle daño, sino para todo lo contrario.
No esperes más a verlo y no te olvides de compartir.
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