La Ley General para el Control de Tabaco está a punto de sufrir una reforma histórica en relación al consumo de tabaco o por lo menos esa es la idea. Luego de años luchando para controlar la venta, compra y exposición del cigarro, una iniciativa para detener su consumo en espacios públicos está en progreso.
Ya se han dado a conocer en incontables ocasiones y en campañas publicitarias sobre los efectos negativos que tiene el cigarro en el ser humano y en el ambiente, sin embargo, parece imposible detener a esa creciente población fumadora a que deje de hacerlo, es por eso que es necesario controlar y proteger a los lugares y a las personas que no lo hacen.
Tal parece que la propuesta tiene intención de reformar la ley en el apartado de consumo, prohibiendo que fumen en espacios públicos en el país, un ejemplo serían: los centros de espectáculos como los conciertos, los parques, estadios y playas.
Para ponerlo en números, «14.9 millones de personas entre los 12 y 65 años de edad, actualmente son fumadoras; la prevalencia por sexo es de 27.1% en hombres y 8.7% en mujeres. El 6.4% de la población encuestada reportó fumar diario, cifra que es de 10% para los hombres y 3.1% para las mujeres», son cifras escandalosas tomando en cuenta la larga lista de enfermedades o condiciones que puede tener la población entre esa ventana de años.
Como parte de intentar disminuir su consumo, también se está planteando impedir la publicidad en las redes sociales y en otros servicios de streaming. Un reporte del diario El Universal informó que además de los lugares citados anteriormente, también quieren agregar los patios, terrazas, balcones parques de diversiones y lugares específicos donde se reúnan menores de edad.
Tanto El Universal como Reforma publicaron lo relacionado a la iniciativa, no obstante, el presidente de la República desmintió que sea un hecho, aunque López Obrador aclaró la situación con un vapeador en mano, tampoco dijo que la iniciativa fuera una idea descabellada.
El propio subsecretario Hugo López-Gatell comentó que la alternativa que últimamente ha ganado terreno entre los fumadores, como los vapeadores o cigarros electrónicos no son una medida útil para dejar de fumar, pero solamente habló sobre eso.
“Quieren echarnos encima a los fumadores. Esto es distinto. Esto es una iniciativa de ley de los legisladores para espacios abiertos. Esto no tiene que ver con nosotros. La iniciativa es del Congreso”, aclaró el presidente respecto a lo publicado con anterioridad.
Entonces, la iniciativa no es por parte del Gobierno, sino del Congreso, es decir, no hay nada confirmado hasta el momento. Al contrario, todo parece estar en al aire, aunque sería una reforma completamente justificada tomando en cuenta todos los efectos negativos que tiene el cigarro.
Cabe mencionar que el decreto oficial para prohibir la circulación y comercialización de vapeadores y cigarrillos electrónicos en el país sí es real. El presidente firmó el acuerdo en el Día Mundial sin Tabaco y fue publicado en en el Diario Oficial de la Federación.
Es por ello, que es necesario separar ambas ideas como dos cosas totalmente aparte, el decreto de los vapeadores es un hecho y fue iniciativa del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador, mientras que la cuestión de la prohibición del tabaco en espacios públicos es del Congreso y no hay nada confirmado todavía.
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