El Gobierno ha confirmado su intención de activar próximamente esta medida
Los conductores en nuestro país acaban de recibir una de las peores noticias en los últimos años. El Gobierno ha dado un paso más en su intención de cobrar por el uso de las autovías.
Se trata de una medida que ya se había planteado instaurar con anterioridad tras ser incluida dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de España remitido a Bruselas.
Sin embargo, ante la enorme polémica suscitada en nuestro país, el anterior ministro de Transportes, José Luis Ábalos, intentó desviar la atención sobre la medida.
Aseguraba que se trataba de un proyecto de cara al futuro que requería de un "diálogo transparente" con los agentes sociales y las administraciones antes de ser aprobado.
A pesar de que el diálogo no se ha producido, el Gobierno ya ha vuelto a manifestar su intención de instaurar esta medida cuanto antes.
De hecho, ahora se considera una medida prioritaria e "imperativa" debido a la necesidad de encontrar nuevas formas para financiar el mantenimiento de estas carreteras públicas.
Así de tajante ha sido el Secretario General de Infraestructuras, Sergio Vázquez, durante un foro organizado por la Cadena SER en Galicia.
"No tiene sentido que haya este vacío y que el mantenimiento y la conservación de la infraestructura se siga sufragando con los impuestos de todos los españoles. Hay necesidades más urgentes como son las políticas sociales", aseguraba el secretario durante el acto celebrado esta misma semana en Pontevedra.
El plan del Gobierno para cobrar por el uso de las autovías en España: será inminente
Desde el más estricto hermetismo, el Gobierno de España ya trabaja en "un sistema de tarificación" en las autovías que afectará a todos los conductores en nuestro país.
A efectos prácticos será un sistema de peajes como el ya establecido en las autopistas, aunque el Gobierno se niega a usar este término para no sembrar el pánico entre la población.
"No le llamaría en el primer lugar peaje. Hablamos de que vamos a implantar un sistema de tarificación. Y no le llamaría peaje porque la gente cuando habla de peaje piensa en unas tarifas similares a las que de las autopistas que se paguen hoy", advertía Sergio Vázquez.
No obstante, las razones esgrimidas por el Secretario General de Infraestructuras no han convencido a muchos.
Todo apunta a que la estrategia de evitar el término peaje no funciona ante una sociedad harta de los elevados precios que conlleva la movilidad en nuestro país. Ya sea a través de medios de transporte públicos o privados.
Ante esta situación se ha vuelto a reabrir un debate que no es nuevo, pero que ahora parece estar más cerca de materializarse. Aunque las previsiones siguen apuntando a su aprobación para el año 2024.
Las opciones del Gobierno para implantar el 'sistema de tarificación' en las autovías
El pasado mes de mayo ya trascendieron a los medios de comunicación algunas de las alternativas que el Gobierno estaba barajando para implantar su sistema de cobro.
Por aquel momento, se estudiaban principalmente dos modelos de tarificación para materializar la medida.
El primero estaría basado en el modelo suizo o alemán, donde se cobra una especie de tarifa plana a todos los conductores.
Se trata de una opción que sería muy similar a los peajes que ya pagamos en las autopistas. Aunque todo hace indicar que el modelo ya habría sido descartado por el Gobierno.
La segunda opción, la más viable, sería a imitación del modelo portugués, donde los conductores pagan en función del número de kilómetros que cada uno recorre.
Según apuntan fuentes del Gobierno, se estudia la posibilidad de establecer un precio de 1 céntimo por kilómetro como recargo a quienes circulen por las vías de alta capacidad del Estado.
En cualquier caso, parece que la medida ya es definitiva y no habrá margen para negociaciones.
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