Para los carteros, los perritos pueden ser su peor pesadilla o sus mejores amigos. Hay algunos peludos que son un poco protectores y ladran sin parar cada vez que un extraño se acerca a su casa. Por suerte, hay un cartero que se las ingenió para robarse el corazón de una peludita.
Martin es un cartero que adora a los animales
Gracias a su trabajo, Martin Studer ha desarrollado una relación maravillosa con una hermosa perrita Golden. Su amistad es la mejor prueba de que con un poco de mimos, cariño y creatividad siempre podemos ganarnos el cariño de los peluditos. Martin ha trabajado como cartero durante muchos años y para él, conocer las mascotas de cada casa siempre resulta muy especial.
Martin trabaja en Brisbane, Australia; y en casi todas sus jornadas de trabajo se encuentra a Pippa. La hermosa perrita es la más simpática del mundo.
Martin es amigo de muchos perritos pero tiene una relación especial con Pippa.
Pippa ha aprendido a reconocer el instante en el que el cartero se acerca a su casa y cuando lo ve comienza a dar pequeños saltitos de emoción.
Su amistad con el cartero es tan fuerte que ella suele recibirlo moviendo la colita de un lado para otro. Cada vez que Martin se acerca con un paquete para la familia de Pippa, ella lo toma con mucha delicadeza con su hocico y lo lleva hasta la casa. Es una perrita muy inteligente y sabe que todo lo que Martin lleva a su casa debe ser tratado con mucho cuidado para dárselo a sus humanos.
A cambio, el cartero pasa unos segundos extras para regalarle mimos y una pequeña sesión de juegos. Lamentablemente, hay ocasiones en donde Martin pasa por la zona pero no tiene ninguna carta para la familia.
“A veces, Pippa sale para la entrega diaria pero no hay correo que pueda recoger, así que decido improvisar”, explicó Martin.
La primera vez que esto sucedió, Pippa quedó con el corazón roto. Había visto a su querido amigo dejar cartas para los vecinos y no podía comprender por qué la ignoraba a ella. Martin notó lo que estaba sucediendo y decidió crear un pequeño truco para no defraudar a su amiga peluda.
Tomó un papel y se lo entregó a Pippa para simular que ella también estaba recibiendo correo. Su cariño por la Golden es tan grande que incluso se tomó la molestia de escribirle un tierno detalle.
“He estado en su zona durante 3 años. Siempre le escribo algo porque no quiero decepcionarla. A ella le encanta el correo y realmente se alegra cuando le entrego esos papeles”, dijo Martin.
El resultado fue tan maravilloso que Pippa no notó la diferencia y parecía muy feliz de cumplir con su tradición junto a Martin. La dulce perrita y el cartero se han convertido en grandes amigos. La alegría de la dulce perrita enterneció a Martin y desde entonces, no ha parado de escribirle pequeñas cartas a Pippa. Es una tradición muy especial entre ellos.
En ocasiones, Martin tiene un par de días libres y envían a otra persona a cubrir la zona de Pippa. Ella no hace más que ignorar al extraño por completo y se niega a recibir el correo si no viene de las manos de su viejo amigo.
Para muchas personas que trabajan entregando paquetes, los perros son su peor pesadilla. Afortunadamente, también existen personas tan amorosas como Martin que no dudan en tomarse un par de minutos extras cada día para ganarse el corazón de los peluditos. ¡Martin es todo un ejemplo a seguir!
Comentarios