A muy temprana edad empezó a estudiar piano y solfeo, participó en varios concursos y protagonizó óperas con Montserrat Caballé o Alfredo Kraus
Recemos todo el mundo por él", dijo Geraldine Larrosa (44), ex mujer de Carlos Marín (53) cuando los pronósticos de su situación en la UCI del hospital de Manchester eran poco halagüeños. Sin embargo, el componente de Il Divo ha muerto este domingo a causa del Covid, según The Daily Mail. Nacido en Alemania hijo de padres migrantes, Carlos fue un niño prodigio que con tan solo ocho años publicó su primer disco, El pequeño Caruso, en homenaje al imponente tenor italiano de finales del siglo XIX y principios del XX y que fue producido por Pierre Kartner (el padre Abraham), conocido internacionalmente por haber compuesto el tema de Los Pitufos.
A tan temprana edad empezó a estudiar piano y solfeo, participó en varios concursos y protagonizó óperas con Montserrat Caballé o Alfredo Kraus, zarzuelas y musicales, entre ellos, La Bella y la Bestia, Grease o Los Miserables, donde conoció a quien sería su primera y única mujer. En 1993 empezó una relación con la actriz y cantante francoespañola Geraldine Larrosa, conocida como Innocence, con quien mantuvo un romance de 13 años hasta que se casaron por sorpresa en 2006 en Disneylandia. Con la excusa de que iban a realizar un reportaje fotográfico en el parque de atracciones le dijo a su novia que se comprara un vestido blanco principesco para que no desentonara con el decorado. Lo que no sabía es que Carlos le había montado toda la boda y se había encargado de convocar a familiares y amigos.
Quisieron tener hijos, pero sus compromisos profesionales hicieron imposible realizar ese sueño. Su historia fue como la de los cuentos de hadas, pero aunque no hubo terceras personas, el amor de pareja se les acabó, divorciándose en 2009. Para entonces, Carlos ya era uno de los integrantes de Il Divo (David Miller, Urs Bühler y Sébastien Izambard), el primer cuarteto operístico en entrar en el Libro Guinness de los Récords fundado por Simon Cowell (62), dueño de la franquicia Got Talent e impulsor, entre otros, de las carreras de Demi Lovato o One Direction.
A pesar del tremendo éxito con el grupo, Carlos siempre fue un hombre sencillo, afable y con gran sentido del humor. Con sus compañeros se entendían en inglés pero de tanto en tanto les solía gastar alguna broma en castellano que, al traducirla, sonaba mucho peor de lo que era. Todos se desternillaban de la risa. En un momento dado tuvieron el placer de actuar con Barbra Streisand en el Madison Square Garden de Nueva York ante miles de personas, entre ellas, Robert DeNiro, Al Pacino o Tom Hanks. En el intermedio, tal y como contaría el artista años después, alguien tocó a la puerta, la abrió en calzoncillos y era Hillary Clinton. ¡Era su fan más acérrima! Quiso hacerse una foto con ellos y cuando Bill Clinton se les presentó les comentó que se uniría a ellos parar tocar el saxo, con el que solía relajarse durante su mandato presidencial en la Casa Blanca.
Tras su divorcio siempre anheló casarse de nuevo y formar una familia. Tuvo algunas novietas, pero con ninguna de ellas llegó a nada serio. Con Geraldine aun seguía teniendo una gran complicidad. Ella fue uno de sus principales apoyos cuando en febrero empezó a recibir amenazas de muerte y acoso por parte de una señora de Barcelona de 72 años que padecía esquizofrenia. La demandó por coacciones, pero gran parte del daño ya estaba hecho. Carlos estaba sufriendo insomnio, había perdido el apetito y tenía mucho miedo.
Il Divo es uno de los grupos más exitosos de los últimos tiempos con más de 26 millones de copias vendidas en el mundo, 160 discos de oro y platino y más de 50 números uno por sus ventas.
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