Los buenos modales, el respeto y la tolerancia ante las personas que te atienden en los locales de comida, ropa o cualquier otro tipo de tienda deben de ser valores fundamentales que muchos deberían de tener y considerar.
Las personas que están del lado del mostrador brindan un servicio, su principal objetivo es tratar de que los clientes tengan una experiencia agradable mientras estén en el establecimiento.
En muchas ocasiones la gente pierde los estribos y Amanda Martínez es el claro ejemplo. Hace días, la mujer fue captada por las cámaras de seguridad del restaurante mexicano Sol de Jalisco en Temple, Texas lanzándole nada más y nada menos que sopa caliente en la cara a la cajera del lugar, Janelle Borland.
Según cuenta Amanda, la causa de la agres1ón fue porque la sopa estaba tan caliente que derritió la tapa del envase, Borland contó que le ofreció cambiarla y también un reembolso pero la mujer estaba notablemente enojada, respondiendo con groserías, al final todo terminó en la agres1ón.
“Ella no parecía querer nada, solo reprenderme, se sintió como si me hubieran rociado con gas pimienta. La experiencia en sí fue traumática y desgarradora. Sentí que mi espíritu se había roto al saber que alguien podía hacer algo tan horrible y luego reírse de ello”, dijo sobre el terrible accidente.
Momentos después, Amanda Martínez huyó del restaurante sin pensar en el daño que pudo haberle causado a la cajera, por fortuna la sopa no estaba tan caliente y el daño fue solo en su ojo por lo picante de la preparación del platillo.
“La sospechosa involucrada en un disturbio el 7 de noviembre en Sol De Jalisco, 4201 S. General Bruce Dr., está detenida desde esta mañana. A las 9.30 am se emitió una orden judicial por agres1ón que causó lesi0nes corporales, a Amanda Martínez, de 31 años, en la carretera estatal 317″.
–Portavoz de la policía dijo a LadBible–
Gracias al rápido accionar de las autoridades y a las evidencias filmadas en las cámaras del lugar, todo está en manos de la justicia, esperando que todo salga a su favor, actualmente la agresora se encuentra en la cárcel del condado, esperando los cargos que se van a presentar en su contra.
Poco después, la propia Borland compartió un video donde platicó su experiencia, no le dedicó palabra alguna, simplemente espera que en el futuro la gente y ella puedan aprender a tolerar y respetar a todos los trabajadores que ofrecen sus servicios.
¿Justificarías este tipo de acciones solo porque no te atendieron bien? Cuéntanos en los comentarios qué opinas al respecto.
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