Las bodas son un momento único y especial que suele planearse con bastante tiempo, pero la mayor parte de los preparativos siempre terminan sobre la novia, quien se somete a una gran cantidad de estrés con tal de que todo quede perfecto, una situación que llevó a una joven inglesa a perder el 90% de su cabellera.
Michelle Wilson-Stimson de 42 años, comenzó a planear su boda desde principios de 2018, pero como muchas otras mujeres que se preparan para el gran día, tuvo que enfrentar problemas con proveedores, cancelaciones y hasta renuncias a última hora.
La mujer pensó que todo terminaría el día después de su boda, pero entonces comenzó la verdadera pesadilla, pues se dio cuenta que el cabello se le había caído por montones y luego de pocas semanas su hermosa melena desapareció por completo, fue entonces que decidió visitar a un profesional.
Inmediatamente los doctores le preguntaron si había pasado por mucho estrés o cambios en su alimentación durante los últimos meses. Entonces Michelle comenzó a contar todo lo que había vivido semanas anteriores.
“Se supone que debía haber sido un día especial, pero me dejó tan ansiosa que ahora estoy sin cabello. La gente no percibe cómo puede ser estresante planificar la ceremonia. El sueño de la boda puede convertirse en una pesadilla”, afirmó la mujer durante una entrevista para Yahoo Brasil.
Mientras la boda se acercaba las cosas se fueron complicando para Michell, primero recibió la noticia de que su vestido llegaría pocos días antes del matrimonio, su estilista le canceló a última hora y el coro no pudo llegar al esperado día, así que puso música de su celular, pero se apagó mientras hacia el tradicional trayecto al altar.
Los médicos le diagnosticaron alopecia por estrés, así que Michelle comenzó a probar todos los tratamientos posibles para mejorar su condición.
“Me quedé con el corazón partido, los profesionales no sabían si mi pelo crecería de nuevo”, recordó la mujer.
Acupuntura, meditación, procedimientos de luz pulsada, suplementos alimenticios, masajes craneales, fueron algunos de los procedimientos que utilizó Michell para recuperar. Sin embargo, su cabello crecía de manera tan lenta que terminó usando pelucas para retomar su vida normal, hasta llegar a aceptar que la alopecia puede formar parte de su vida para siempre.
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