En un sentido, tenemos con nuestros hermanos o hermanas un mismo destino, ya que nacemos en una familia que no elegimos (como sí elegimos nuestros amigos o nuestra pareja). Algunos hermanos se entienden a la perfección, otros se pelean constantemente.
Aunque compartan alrededor del 50% del ADN, los hermanos son casi siempre muy distintos entre sí. Incluso hermanos gemelos (que comparten los mismos genes) muchas veces resultan ser muy diferentes.
A pesar de esto, hay ciertas características en común que todos los hermanos comparten -incluso esos que son extremadamente diferentes-. En este artículo te mostramos 6 cualidades que seguramente podrás identificar si tienes la suerte (¿o la desgracia?) de tener hermanos.
1. Intentan diferenciarse el uno del otro
Todos los hermanos tienen en común el intento a toda costa de diferenciarse los unos de los otros. Esto es probablemente una forma de evitar rivalidades, ya que así se elimina la comparación. Por eso tiene mucho sentido que los hermanos intenten inconscientemente asentar su identidad.
2. Tienen formas similares de activismo
Algunas investigaciones demostraron que las personas tienden a participar en elecciones políticas cuando tienen un hermano o hermana que también lo hace. Tu activismo está en gran parte influenciado por lo que aprendiste de tus padres, pero tú y tus hermanos seguramente comparten también similitudes en las actividades políticas.
3. Son muy unidos
Ya sea contra los padres o contra el matón de la escuela, los hermanos se muestran unidos sin que importe demasiado qué tan bien se lleven: si se trata de defenderse de alguien, los hermanos no se separarán.
4. Tienen huellas dactilares similares
No hay dos personas en el mundo con huellas dactilares exactamente iguales (ni siquiera hermanos gemelos). Sin embargo, las huellas dactilares de los hermanos muestran muchas veces similitudes. Investigadores llegaron a los resultados de que el tamaño, la forma y la distancia de las líneas de los dedos están determinados por factores genéticos. Y, debido a que los hermanos comparten muchos genes, sus huellas dactilares serán bastante parecidas entre sí.
5. Se ayudan a potenciar la empatía
Científicos investigaron de qué formas los hermanos se influencian mutuamente en la construcción de sentimientos empáticos (por ejemplo, cuando encuentran a alguien en situación de emergencia). Los resultados muestran que tanto los hermanos más pequeños como los más grandes influencian de forma positiva el sentimiento de empatía. No importa qué clase de relación tengas con tus hermanos: lo cierto es que las experiencias tempranas seguramente te ayudaron a crear sentimientos claves para algunas situaciones (por ejemplo, la capacidad de resolver un conflicto o de guardar un secreto).
6. Tienen su propio idioma
Los hermanos se entienden entre sí. Muchas veces incluso sin palabras. En ocasiones les basta para comunicarse una mirada particular -que nadie entendería además de ellos-, o simplemente se ríen de bromas que solo a ellos les resultan graciosas. Muchos hermanos crean también a lo largo de los años un lenguaje propio con el que se comunican en privado.
Los hermanos tienen un papel muy importante en nuestro desarrollo individual: tener hermanos significa aprender a hacer compromisos, a desarrollar empatía, lealtad y, sobre todo, a compartir. Pero también, tener hermanos significa competir, pelear, compararse y desarrollar sentimientos contradictorios hacia esas personas tan importantes en nuestra vida. ¿Cómo es tu relación con tu(s) hermano(s)?
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