Por muy divertido que sea, cocinar es a veces una experiencia bastante caótica; la cocina suele terminar como si la hubiera azotado un huracán. ¿Cuántas veces has causado tú mismo un revuelo tratando de buscar el abrelatas que necesitabas con urgencia? Además, limpiar el caos después de cocinar lleva mucho tiempo y puede ser muy desagradable. Pero no te preocupes, estos 12 consejos te ayudarán a mantener tu cocina en orden o, al menos, a acortar el tiempo de limpieza.
1. Usa un plato de cartón para evitar salpicaduras de la batidora
Para prevenir que la comida salga disparada por todos lados mientras usas tu batidora eléctrica, inserta un plato de cartón a través de los tubos de las aspas para que sirva como tapadera del recipiente.
2. Abre la botella de vino con una llave
Puedes usar una llave para abrir una botella que contenga un corcho de plástico. Primero inserta la llave levemente inclinada y entiérrala a presión. Con mucho cuidado, gira el corcho y tira hacia arriba lentamente.
3. Abrir una lata con una cuchara
Puedes abrir una lata sin abrelatas si usas el cuenco de una cuchara para hacer una hendidura en el borde de la tapa. Una vez que hayas logrado insertarla, desliza la cuchara por todo el borde de la tapa hasta que puedas abrirla.
La mayoría de las latas contienen una tapa delgada, por lo que pueden abrirse con cierta facilidad.
4. Tetera y cinta adhesiva
Después de servir el té siempre se escurren algunas gotas de la boquilla de la tetera y generalmente caen sobre el mantel. Para evitar que esto suceda, solo tienes que pegar un poco de cinta adhesiva debajo de la boquilla y cortar las esquinas. La superficie repelente al agua de la cinta previene el goteo de la tetera.
5. Palillos chinos y pinzas para ropa
Si te cuesta trabajo comer con palillos, unas pinzas para ropa puede facilitarte la tarea. Simplemente retírale la parte de metal e insértala en los palillos para sujetarlos de la misma manera que con las pinzas. Los palillos se mantendrán en su sitio y te resultará más cómodo disfrutar de la comida asiática.
6. Limpiar la masa de la plancha de gofres
Para limpiar la plancha de los gofres de manera eficiente, tienes que ponerla a calentar para que la grasa se disuelva en la superficie. Después prepara una "masa" que consiste en tres cucharadas de maicena y tres de agua. Extiende esta mezcla sobre la plancha y haz un gofre. La maicena absorberá la grasa y recogerá todos los restos de gofre.
7. Colocar dos bols en el microondas al mismo tiempo
¡Qué frustrante! Quieres calentar a la vez dos recipientes de comida en el microondas, pero el espacio es insuficiente. Sin embargo, existe una solución muy simple: coloca uno de los bols sobre una taza para ganar espacio en el plato del microondas. ¡Tipo Listo!
8. Limpiar una botella por dentro con arroz
Para limpiar el interior de una botella reciclable, llénala con tres cucharadas de arroz crudo y agua. Ciérrala muy bien y agítala vigorosamente. Después agrega más agua al arroz y vuelve a agitar la botella. Por último, vacía y enjuaga la botella.
9. Limpia el molino de café con granos de trigo (espelta)
Puedes limpiar los residuos de tu molino de café si le agregas un puño de trigo espelta al contenedor. Este suave grano no dañará el triturador y, en cambio, recolectará los restos de grasa.
10. Periódico para combatir el olor de los recipientes de plástico
A veces los contenedores de plástico, tipo Tupperware, retienen olores a comida. Si el interior tiene algunos rasguños, es probable que los restos se acumulen en esas diminutas hendiduras, lo que provoca aromas indeseados.
Para prevenir esos olores desagradables, coloca una bola de periódico dentro del Tupperware para que absorba la humedad y elimine los hedores.
11. Harina para prevenir salpicaduras de aceite caliente
El primer contacto de la carne o pescado con la sartén caliente suele provocar salpicaduras de aceite. Para prevenirlas, mezcla el aceite con un poco de harina antes de colocar la comida en la sartén para que absorba la humedad.
12. Sacar el aire de una bolsa para congelar
Para retirar el exceso de aire de una bolsa de congelar, hazle un pequeño agujero en una de las esquinas y sumérgela con la comida en un bol con agua lentamente hasta alcanzar la abertura. La presión del agua forzará la salida del aire de la bolsa.
Una vez que el aire ha sido expulsado, sella la bolsa, sécala y métela al congelador. Se recomienda usar una bolsa con cremallera para este truco.
Aquí los tienes: menos líos y algunas ingeniosas alternativas para dejes de romperte la cabeza a la hora de buscar algún utensilio. Sin duda, estos trucos te serán muy prácticos la próxima vez que te zambullas en la cocina.
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