Un veterinario holandés ha compartido esta preciosa imagen de un jumento que intenta aliviar la pena por haber perdido a su cría, mimando a este potrillo huérfano.
La foto fue tomada al poco tiempo de que caballo y potro se conociesen y fue publicada en la página Facebook de Equicaption, el pasado viernes.
La imagen se hizo viral rápidamente y al día siguiente, sábado, ya había sido compartida 83 000 veces y tiene 227 000 "likes".
El doctor Patrick Brogan, especializado en la fertilidad de los equinos, creó Equiception el pasado mes de abril. Un día lo llamaron para que acudiese a una granja de Utrecht para ayudar a parir a una yegua.
"Yo veía que ella lo estaba intentando con todas sus fuerzas", decía el veterinario. "Pero no había forma de que su cría naciera".
"Entonces decidió sacar al potrillo, que estaba doblado en dos y se había dado la vuelta. Había muerto en el útero de la madre.
"Zindita estaba muy triste, es una yegüa muy dulce", relata Brogan.
Dos días más tarde, un colega le habló de una potrilla recién nacida que había perdido a su madre, a causa de complicaciones en el parto.
"Simplemente, los reunimos. Tan fácil como eso".
Pero conseguir algo así no siempre resulta tan fácil.
La voluntad de Zindita de hacerse cargo de la potrilla es bastante inusual ya que las yegüas pueden ser agresivos con potrillos que no son los suyos.
"Simplemente, tuvimos la suerte de que la yegüa aceptase a la cría,", "Zindita se enamoró de ella en cuanto la vió".
Zindita se encargará de criar a la pequeña Tolanda hasta que esta pueda valerse por sí misma. Ambas son vigiladas aunque en unos días, ya podrán pastar solas.
"Los bebés necesitan algunos días para aclimatarse al nuevo entorno. Tolanda ha tenido unas primeras horas difíciles, ", comenta Brogan.
Si la yegüa no hubiera adoptado a la potrilla, ésta habría sido criada por humanos aunque este tipo de crianza no es tan sano y natural como la que le ofrecerá Zinita.
Brogan y su equipo siguen muy de cerca la aclimatación de Zindita y Tolanda, encantados de la situación.
"Es una historia triste con final feliz"
¿Qué te parece la preciosa historia de Zindita y Tolanda?