La música no tiene edad. No hace falta que empieces a practicar de pequeño o que no seas un experto. Cuando veas moverse a esta mujer, comprenderás que siempre hay tiempo para hacer lo que se desea. Y además, disfrutarlo.
Si ya has probado a bailar como si nadie te viera, como si nada importara, comprenderás mejor a esta bailarina espontánea. Si por el contrario no sabes lo que se siente, viendo lo que ella hace te dará una idea.
Hay que tener mucha libertad y seguridad para poder actuar como ella. No todos seríamos capaces, la vergüenza o el miedo no nos dejarían. Y sin embargo, no hay nada mejor que sentirse libre para poder hacer las cosas que nos hace felices sin estar pensando en qué pensarán los demás.
Esta mujer no solo nos da una lección de baile, sino de vida también. Si todos fuéramos un poco más como ella las cosas en el mundo mejorarían.