Hay ciertos animales a los que no les damos la oportunidad de conquistarnos. Culturalmente, muchos de ellos han sido retratados como monstruos o seres peligrosos, cuando la realidad es que pueden llegar a ser tan cariñosos y adorables como un cachorrito.
Porque ¿qué piensas de los tiburones o los murciélagos? Seguro que no te acercarías a ellos ni por todo el oro del mundo. Son concebidos como animales malvados, que te atacarían y acabarían contigo por el simple placer de la sangre.
Pues lo cierto es que ni unos ni otros son tan malos, solo especies con su propia naturaleza, que no es la de matar sin más.
Hoy queremos enseñarte una prueba de cómo algunos de estos animales pueden cambiar tu perspectiva. Se trata de los murciélagos conocidos como zorros voladores, una especie autóctona de algunos países del sudeste asiático que hará que empieces a adorarlos.
Estos murciélagos tienen una cara tan adorable como la de cualquier gatito, se alimentan de fruta y néctar de flores y pueden llegar a medir casi dos metros con las alas estiradas.
No tengas miedo y acércate a esta preciosidad; si esos ojitos no ablandan tu corazón, nada lo hará.