Sus comportamientos hablan por sí solos y son los que te hacen pensar sobre su inmadurez. Hace chistes tontos o bromea por cualquier cosa. También realiza actividades que para ti, ya no corresponden a su edad, como jugar videojuegos todo el santo día. Se tira gases sin importar tu reacción en el auto, pues en realidad eso a él le divierte. Este tiempo de ‘hombres’ inmaduros existe y siempre llegan a nuestra vida.
Con sus actitudes a veces dudas si estar con él es lo que debes hacer. Tú no estás equivocada, ya que si todo esto te ocurre con tu novio en la relación que mantienen, debes estar clara que es un verdadero inmaduro.
Bien dicen que los hombres maduran después que nosotras. Un estudio de la Universidad de Oxford ratificó lo que muchas ya sospechábamos: los hombres maduran después que las mujeres y al parecer lo hacen alrededor de los 40 años.
La expertos coreanos y del Reino Unido, establecieron que los hombres muestran un inicio tardío en el desarrollo de las materias blanca y gris en el cerebro, sucesos que ocurren antes en las mujeres sin que esto implique una afectación a las características topológicas globales que garantizan un desarrollo cerebral saludable en ambos sexos.
Ademas de esto, un análisis ordenado por la cadena Nickelodeon del Reino Unido reveló que los hombres maduran alrededor de los 43 años, unos 11 años más tarde que las mujeres.
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Los investigadores llegaron a esta conclusión tras una encuesta donde ocho de cada 10 mujeres creyeron que los hombres carecen de inmadurez a cualquier edad que tengan. Por esto, consideran que ellas siempre son las que terminan llevando los pantalones en la pareja, y 46% dijeron sentirse no la novia, si no como su madre porque son unos niños eternos.
Revelaron, además, que los comportamientos más comunes en los hombres (desde los 16 hasta los 43) van desde tirarse gases, manejar más rápido de lo establecido hasta jugar videojuegos. En concreto hacen énfasis en el comportamiento inapropiado, en la no valoración de los sentimientos de otras personas cercanas (como la pareja), en su egoísmo y en el no estar emocionalmente disponibles, ya que siempre desean estar de fiesta y no enseriarse.