Aunque usualmente los niños reciben los alimentos con supervisión de sus padres o tutores, hay algunos frutos que parecen inofensivos pero pueden representar un verdadero peligro cuando lo consumen los menores de edad.
Hace algunos días se conoció el caso de una pequeña de solo cinco años que falleció en un hospital de Badajoz, España, luego de sufrir una parada cardiorrespiratoria mientras se encontraba consumiendo frutos secos (se desconoce si en paquete o el fruto como tal).
Según reseñan medios locales, la insuficiencia respiratoria se registró mientras la niña estaba en un parque y se atragantó ingiriendo granos de maíz. Fuentes del Servicio de Salud de Mérida precisaron que “la presencia de un cuerpo extraño en las vías respiratorias” ocasionó la obstrucción en los pulmones de la menor y la parada cardiorrespiratoria.
La pequeña fue trasladada a un centro asistencial cercano pero por la gravedad de su caso recibió atención en el Hospital Materno Infantil de Badajoz, donde desafortunadamente falleció. Los pediatras han recordado el peligro que puede representar para los niños consumir este tipo de alimentos.
En Gijón, al norte de España, otro menor de 10 años tuvo que ser atendido de urgencias en una sala de cine luego de que se atorara mientras comía una bolsa de palomitas de maíz. Aunque los frutos secos suelen venderse como ‘saludables’, no se aconseja su consumo en niños debido a casos de atragantamiento, que también se presentan con aceitunas, uvas o salchichas.
Expertos recomiendan reducir al máximo el peligro de asfixia en los niños y proporcionarles únicamente alimentos con un tamaño adecuado para su edad. Comer sin prisa y masticar lo necesario los frutos,son otros de los consejos que ofrecen.