Todos hemos escuchado en alguna ocasión la frase “el cliente tiene la razón”, pueda que esto se cierto o que sólo haya sido inventado por los dueños del lugar para la satisfacción de los clientes, sin embargo, creo que eso no nos da el derecho de tratar mal al personal que nos atiende, avergonzarlos o humillarlos pues al hacer esto corremos el riesgo de recibir un trato por igual por parte de ellos, finalmente somos humanos.
Algo similar le ocurrió a dos mujeres que se encontraban comiendo en un restaurante en Ucrania, cuando llegaron al límite de su arrogancia, recibieron su merecido.
Las dos comensales comenzaron a portarse de una manera descortés, arrogante, irrespetuosas e insultantes con las personas que les estaban brindando el servicio, mostrando el poco respeto por el trabajo que los meseros estaban haciendo.
Cuando una persona es irrespetuosa y grosera no puede esperar un trato de amabilidad y tolerancia por parte del otro porque finalmente todos tenemos un límite, algunos testigos del lugar comentaron que los dos meseros perdieron el control ante el terrible trato por parte de las dos mujeres.
De acuerdo con algunos testigos, desde el momento en que llegaron las dos mujeres comenzaron a comportarse de una manera insoportable. Comenzaron a tratar a los dos camareros de una manera despectiva en todo momento.
El vídeo que te mostramos a continuación fue grabado por uno de los comensales que se encontraba en la mesa de a lado, en el se puede observar como se les ofrece de manera amable y con una sonrisa un postre, pero las mujeres de un modo muy grosero lo rechazan, el hombre no resiste el trato que recibe de las mujeres y lanza el pastel justo a la cara de una de ellas.
Después de esta acción las mujeres se ponen de pie y una de ellas lanza el contenido de una copa hacia la cara de uno de los meseros, pero el hombre que ya había lanzado el pastel le arroja el resto no pudiendo pasar por alto la humillación hacia su compañero.
Los camareros lanzan sobre la mesa las charolas que contenían los postres, dejan a las mujeres ahí gritando y quejándose por lo ocurrido, mientras podemos escuchar la risa de la persona que graba por tal humillación que las mujeres se merecían.
Por si te preguntas si los dos meseros fueron despedidos o sancionados, la respuesta es no, a diferencia de muchos restaurante, el lugar no tomó represarías contra los dos jóvenes y se mostraron solidarios con ellos al no dar ninguna declaración ante los medios.
La mayoría de los clientes se mostraron solidarios también con los dos meseros y comentaron que ellos estaban atendiendo de la manera más amable y eficiente a todos pero las dos mujeres eran terriblemente insoportables.
¿Crees que los meseros hicieron lo correcto o crees que se portaron de una manera incorrecta? ¿Qué hubieras hecho tu en el lugar de ellos?