Comenzó como un hobbie que se transformóoen un emprendimiento que ayuda al medio ambiente.
Roberto Rea Martínez es un hombre de 73 años originario de, Guanajuato, México que elabora escobas con botellas de PET. La idea surgió a raíz de la pandemia pues Roberto tuvo que dejar su trabajo para salvaguardar su salud.
Debido a que forma parte de la población vulnerable, tuvo que permanecer en su casa todo el tiempo durante la cuarentena por C0VID. Roberto entonces se preguntó qué podría hacer con todo ese tiempo libre y comenzó a buscar videos en internet. Finalmente encontró algo que le llamó la atención y quiso intentarlo.
El hombre contó al diario local El Sol de Salamanca que encontró tutoriales en portugués sobre cómo hacer escobas a partir de materiales reciclados. Roberto los vio una y otra vez hasta que aprendió el proceso de elaboración y luego empezó a fabricar sus propias escobas.
Usando botellas de plástico tipo PET, Roberto crea escobas fuertes y duraderas desde noviembre del 2020. Además, cuenta con variedad de formas y tamaños para todos los gustos y necesidades.
Poco a poco, Roberto fue perfeccionando su técnica y hasta hizo sus máquinas de trabajo. Mencionó que estos suelen ser muy caros por lo que, también haciendo uso de objetos reciclados, Roberto fabricó un taladro fijo, un comprensor y otros artefactos. Estas máquinas le permiten acelerar el proceso de elaboración. «Incluso ya hice una que me ayudará para hacer tendederos también de pet«, comentó.
Para cada escoba, Roberto usa en promedio 30 botellas de 3 litros.
Las escobas son artesanales, hechas a mano con 100% de materiales reciclables, lo que las vuelve un producto que contribuye al cuidado del medio ambiente. De hecho, Roberto no ve su trabajo solo como un negocio sino como una forma de reducir la contaminación. Él considera que su misión es continuar reciclando botellas de PET para darle una segunda vida y reducir la contaminación.
El costo de cada escoba es de 80 pesos y se pueden adquirir a través de su página de Facebook Escobas de PET “Robert”.
«Yo quiero enseñar a más personas para que hagan este tipo de trabajo que es amigable con el medio ambiente y es muy duradero, además invito a las personas que tengan botellas que ya no quieran me las hagan llegar«, concluyó Roberto.