Para nadie es un secreto que los abuelos siempre consienten demasiado a sus nietos y aunque en muchas ocasiones podríamos considerar que esto podría malcriarlos, la realidad es que son un elemento fundamental para su crianza, en especial las abuelas.
Así lo demostró una investigación que se llevó a cabo en la Escuela de Economía y Ciencia Política de Londres, en la cual se analizaron 45 estudios provenientes de cierta variedad de población con un gran rango geográfico, descubriendo que las abuelas maternas tienden que mejorar las tasas de supervivencia infantil.
La investigación se titula: “¿Quién mantiene a los niños vivos?”, y en este se sugiere que si bien la ayuda por parte de los parientes puede ser importante en la crianza de los niños, solo en un pequeño número de casos se reportan efectos beneficiosos.
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A diferencia de el papel de las abuelas maternas, en donde la compañía de estas ayudan a mejorar las tasas de supervivencia infantil. Las abuelas paternas también logran registrar beneficios, pero en una menor medida frente a las maternas.
Durante la adolescencia, la presencia de los abuelos logra contribuir al bienestar del menor, así lo reporta un estudio publicado en Science Daily.
En la encuesta hubo participación de 596 adolescentes entre los 11 y 16 años, y se logró identificar que un tercio de los encuestados recibe cuidados de sus abuelas y un 40% solo está ocasionalmente con ellas.
También se logró descubrir que los abuelos suelen tener más tiempo para ayudar a los niños en sus actividades diarias e incluso poder dialogar sobre sus problemas, en comparación con los padres y madres trabajadores.
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Una de las expertas a cargo de la investigación, Eirini Flouri, destacó que las relaciones cercanas entre abuelos y nietos “amortiguaron los efectos de eventos adversos en la vida como la separación de los padres”. Sin duda alguna crecer junto con los abuelos es altamente beneficioso para los jóvenes y su desarrollo.