En comparación a nosotros los humanos, los animales tienen muchos más obstáculos al cuidar de sus crías. Ellos están expuestos al clima, son perseguidos por enemigos naturales, las fuentes alimenticias son cada vez más escasas, y hasta los humanos con los modernos medios de vida son una amenaza. Por eso mismo se comprende porque los animales invierten tanto cuidado, protección y amor al cuidar de sus crías. Estas fotografías son la evidencia más convincente y conmovedora.
Una ardilla bebé. No es más grande que un dedo pulgar, pero significa el mundo para su madre.
Padre e hijo. De tal palo tal astilla
Sniff, sniff – Creo que nos conocemos.
¡Un Segundo: uno, dos, tres….algo no está bien aquí!
¡Qué hermosoooo!
¿Y entonces, junior, salimos a nadar?
¡Qué bien, tiempo de un abrazo!
Ahora a salir por un poco de aire fresco.
Tomando un taxi compartido hacia el Kínder.
¡No tan rápido Papá!
Literalmente tomando a sus pequeños bajo sus alas.
¡Esto es demasiado emocionante! Deja me sujeto.
¿Qué hay para cenar? ¡Una rápida reunión familiar!
¿Quién dijo “bestias peligrosas”? ¡Ése es un clip de papel con cola!
¿Todo mundo abordo? ¡Vamos por un paseo…!
Una familia moderna en el reino animal – Dos madres y un cachorro.
¡Sé exactamente dónde tienes cosquillas!
¿Y entonces, qué tal es el aire allá arriba?
Mientras la madre busca comida, el pequeño oso hormiguero toma la siesta.
¡Acérquense más! ¡El pequeño Bengt-Torben-Moritz siente frío!
¡Dame la nuez, pequeño!
¡Pero mamaaaá, ya me bañé!
Obviamente: ¡Familiares en primer grado!
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