Vemos muchas casas pequeñas, pero pocos son tan pequeñas como la de Lulu.
Originaria de Argentina, ahora vive en los Estados Unidos y decidió transformar un contenedor vindo de China para hacer la casa que comparte con su hija.
La operación de transformación duró un mes y, a pesar del hecho de que Lulu no tiene experiencia en la construcción, ella fue capaz de instalar ventanas, aislar las paredes y montar una cocina funcional para $ 4.000.
"Cuando se tienen pocos recursos, debemos ser creativos", dijo. Después de algunos viajes al vertedero, se encontró casi todo lo que necesitaba para construir una casa a partir de materiales reciclados, incluyendo un inodoro, bañera, lavabo y lo que se necesita para hacer una sala de juegos.
En el vídeo a continuación, se puede visitar su casa totalmente original y funcional.