La granizada que cayó este domingo pasado en Queensland (Australia) fue espectacular y causó muchos destrozos a causa del tamaño y violencia del hielo. Las piedras que cayeron parecían pelotas de tenis que lo destrozaron todo, incluso con viviendas gravemente afectadas. Más de 23.000 hogares se quedaron sin electricidad por la fuerte tormenta.
Las grandes bolas de hielo hacían un tamaño aproximado de 6 centímetros y llegaron a perforar parabrisas de vehículos y muchos tejados de viviendas. Asimismo, el fuerte viento que acompañaba la tormenta dejó rachas que llegaron a tirar al suelo algunos árboles. Estas son las espectaculares imágenes de la granizada:
Lo de Australia es tremendo. Ojo a la granizada en el estado de Queensland, vídeo de Lisa Thomas. pic.twitter.com/XLqYYqYBgy
— TELEPLANETA (@rtveteleplaneta) November 17, 2019
Believe it or not, these are hailstones caught in nets protecting lychees at Yanalla Farms in the Glass House Mountains, Queensland. Car windows smashed by hail the size of cricket balls. Credit: Yanalla Farms pic.twitter.com/PQfER3AzoX
— BBC Weather (@bbcweather) November 18, 2019
Hail pelted down on communities across the Sunshine Coast in Queensland, Australia on Sunday, November 17.
— euronews (@euronews) November 18, 2019
The hail and “damaging winds” were part of a “very dangerous” storm in the area, the Bureau of Meteorology said.https://t.co/5ig2my4IZY pic.twitter.com/62qrImKRpu
A ferocious #thunderstorm hit the Gold Coast and Sunshine Coast in the South-East #Queensland, bringing smashing suburbs with destructive winds and copious amounts of giant hailstones with the size of golf to cricket balls. pic.twitter.com/RvhhPIP9lu
— Joint Cyclone Center (@JointCyclone) November 17, 2019
Tormentas lejos de las zonas de los incendios
Estas tormentas se han producido lejos de las zonas de Australia donde los incendios siguen quemando sin control miles de hectáreas. Hay casi 60 fuegos activos, se calcula que se han quemado ya cerca de un millón de hectáreas, ha habido 4 muertos y 270 casas se han quemado completamente. Las llamas amenazan ahora la ciudad de Sídney.