Cuando viajamos a una ciudad nueva nos preocupamos por conocer también su historia y para ello el arte siempre ha sido uno de los caminos más certeros. Prácticamente todas las ciudades cuentan con varios museos que nos abren la puerta no sólo a la historia de la ciudad, sino también a la visión de diferentes artistas, al mundo científico o antropológico.
El turismo cultural se ha convertido, por tanto, en una experiencia aclamada, sobre todo porque son los propios museos los que intentan diferenciarse del resto con obras únicas y siempre podemos encontrarnos alguna que otra sorpresa.
En 2009 nos quedábamos asombrados al conocer la apertura del primer museo submarino del mundo (MUSA). Este museo cuenta con más de 500 esculturas en las profundidades de las aguas que rodean Cancún, Isla Mujeres y Punta Nizuc, en México. Allí se aguardan las obras del escultor Jason deCaires Taylor, que ahora también podemos ver en Europa.
Y es que el mismo escultor ha participado con el Museo Atlántico, el primer museo submarino de Europa que se encuentra en la isla de Lanzarote, Islas Canarias, España. Tiene una superficie aproximada de 2.500 metros cuadrados, a unos 12 metros de profundidad, y ahí podemos ver más de 300 esculturas de tamaño natural que representan situaciones cotidianas.
La creación del museo ha llevado más de dos años, pero por fin «abre sus puertas» para convertirse, además de en una experiencia artística, en un arrecife artificial a gran escala que ayude a la conservación del medio.
Te invitamos a sumergirte con nosotros y conocer un poco más de cerca algunas de las esculturas que encontramos en este museo submarino. Sin duda, la experiencia tiene que ser genial, ¿no crees?