Es indignante ver lo que las personas pueden hacer esto solo por estar molestos o su crianza haya sido trágica, después de que conozcas los detalles me darás la razón. Es necesario que te tome unos minutos y veas el daño que le hace esta pequeña y es aun mas doloroso quien se los ocasiona.
La historia que te traemos a continuación es de una abuela que maltrata a su nieta de 7 años de una manera tan horrible que le provoca heridas muy graves y deformidades. Así que lee hasta el final para que conozcas esta triste historia y recuerda dejarnos tu comentario que tu opinión es importante para nosotros.
De forma regular la imagen de una abuela acostumbra a remitirnos a gratos recuerdos, aprecio, cariño y cuidados que a veces acostumbran a ser más tiernos que los de nuestros padres; el sazón de una sopa, un jersey o bien bufanda tejida con las propias manos de aquella mujer que tiene el tacto ideal para mimarnos y probarnos su amor solo nos puede hacer meditar en cosas positivas.
No obstante, no todas y cada una de las personas tienen la suerte de tener en su vida a alguien así; tal vez por el hecho de que el ciclo de la vida no dejó que disfrutaran de esas muestras de cariño o bien por el hecho de que se hallan geográficamente distanciadas.
Asimismo existen casos en donde, si bien nos cueste trabajo creerlo, ese amor y cariño se ve reemplazado por atrocidad, tortura y maltrato, tal y como ocurrió con una pequeña de siete años habitante de la urbe de México.
Este miércoles ocho de marzo, la Procuraduría General de Justicia de la Urbe de México notificó sobre la detención de una mujer de la tercera edad por ser sospechosa de maltratar a su nieta, una pequeña de apenas 7 años de edad a quien el gobierno de la capital del país brinda servicios de asistencia integral, incluyendo cirugías reconstructivas derivadas de las heridas que su abuela le provocó al efectuar actos de tortura en contra suya.
La investigación de este caso empezó el veintidos de diciembre de dos mil dieciseis, cuando el representante social de la PGJ-DF recibió la notificación de un caso médico legal del Centro de salud Pediátrico Moctezuma, reportando el ingreso de una menor localizada con signos de violencia en el rincón de la Calle sesenta y siete y la calzada Ignacio Zaragoza.
Los policías auxiliares que la hallaron reportaron al instante de llevarla al centro de salud que la pequeña se hallaba sangrando debido a una herida en el labio superior derecho; no obstante, después de efectuarle estudios médicos completos se especificó que la pequeña presentaba distintas lesiones en múltiples unas partes del cuerpo, huellas recientes de encadenamientos en las manos, heridas en etapa de cicatrización, tumoración en la frente, deformaciones en el cráneo, cortes hechos con arma punzo tajantes en el cuello, rodillas desfiguradas, anemia, dermatitis y sarna.
La víctima declaró que su abuela la golpeaba con un cilindro y la encadenaba a una ventana, aparte de que la forzaba a continuar en una situación muy incómoda, sin comer ni dormir bien.
Además de esto dio los nombres sin apellidos de sus familiares, situación que complicó la busca de la probable responsable, mas tras múltiples semanas de investigación, las autoridades capitalinas consiguieron situar a su abuelo materno.
El hombre cooperó con la investigación y declaró que desde hace un par de años no vivía con su familia, mas sabía que su pareja era la responsable de cuidar de la pequeña.
Fue entonces cuando agentes de la Policía de Investigación situaron el domicilio de la imputada, en el ayuntamiento mexiquense de Ixtapaluca, en donde asimismo hallaron a 3 pequeños de cinco, ocho y nueve años, los que son primos de la menor perjudicada.
Los pequeños fueron trasladados al Centro de Estancia Transitoria para Pequeños y Pequeñas de la procuraduría de la Urbe de México, en donde tras darles un chequeo médico y nutrirlos, declararon que habían sido testigo de las torturas y el trato inhumano que su abuela le daba a la pequeña de 7 años.
Las investigaciones por este caso siguen para poder encontrar a los progenitores de los menores y determinar por qué razón se hallaban al cuidado de la abuela, pese a los evidentes signos de maltrato.
Las autoridades de la capital del país siguen brindando tratamientos médicos para conseguir la restauración total de la menor, los que incluyen servicios de dermatología, prótesis, infectología, medicina neurológica y cirugía plástica.