La vida es como una caja de sorpresas, jamás deja de asombrarnos y lo que menos esperamos que suceda, pasa inesperadamente.
Kimberly Fugate sabe muy bien de lo que hablamos pues esta mujer a sus 41 años de edad, quedó embarazada de trillizos, aparentemente.
Jamás imaginó que a esa edad quedaría embarazada de nuevo pues ya tenía una hija de 10 años, además, no fue algo que estuviera planeando.
Lo más asombroso y que la dejó en shock fue que los médicos le dijeran que esperaba trillizas idénticas, algo que la familia no podía creer pero que los había llenado de emoción y felicidad.
La familia de Kimberly y Craig, su esposo, ascendería a un número considerable y aunque no era algo que habían planeado, estaban felices, sólo les preocupaba el hecho de que todo saliera bien y que estas nacieran con salud.
Cuando el gran día llegó, otra noticia los dejaría impactados, algo a lo que ni los médicos daban crédito.
Todos sabemos que un embarazo a una edad avanzada implica más riesgos y complicaciones médicas que cualquier otro y por eso el matrimonio decidió prepararse, no querían dejar pasar ni el mínimo detalle. Kimberly no sólo estuvo monitoreando su salud constantemente sino que también decidieron mudarse a una casa más grande para la comodidad de todos.
¡Por fin las trillizas conocieron el mundo! El parto duró casi tres horas pero el tiempo valió la pena pues Kimberly por fin podía tener en sus brazos a sus bebés, ¡era un gran momento! Nadie se esperaba lo que estaba a punto de acontecer.
El médico llamó rápidamente a una enfermera y anunció que había otro bebé, ¡otro!, los padres no podían creerlo, no se irían a casa con trillizas sino con cuatrillizas.
Ni siquiera el médico esperaba lo sucedido y habían una explicación para ello: una de las bebés se estuvo escondiendo detrás de alguna de sus hermanitas durante las ecografías y por eso no había sido posible mirarla.
El parto fue bastante inusual pues concebir cuatrillizos de forma natural es 1 entre 729.00, además, que estos sean idénticos es aún menos usual.
Kimberly confiesa sentirse la mamá más afortunada del mundo y la más bendecida pues asegura que las bebés han traído mucha alegría a su vida y a su hogar.
Las cuatrillizas tuvieron que pasar varias semanas en el hospital hasta que sus órganos se desarrollaran completamente pero por fortuna ahora se encuentran en casa junto a sus padres y hermana mayor.
¡Mira cuanto han crecido estas pequeñas!
Además de la edad, lo asombroso aquí es que fueran cuatrillizas idénticas y que todas nacieran bien ¡un verdadero milagro!
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