La mujer sufrió un paro cardíaco y estuvo clínicamente muerta
Kathy Patten se encontraba en su domicilio cuando recibió la llamada de su hija informándole de que estaba de parto. La alegría no podía ser más grande. Tras nueve meses de espera por fin iba a conocer a su nieta.
Sin embargo, el destino quiso jugar un poco y decidió complicarle las cosas a Kathy. Justo cuando se dirigía al hospital, sufrió un ataque del corazón. Rápidamente fue ingresada en el mismo hospital donde su hija se encontraba dando a luz.
Los servicios de emergencia hicieron todo lo posible para reanimarla, pero la mujer estuvo 45 minutos muerta. Minutos después se obró el milagro, Patten estaba dispuesta a conocer a su nieta y 'revivió', dejando a todos sorprendidos.
Revive para conocer a su nieta
En muchas ocasiones se habla del poder que tiene el amor de una madre por sus hijos. Pero poco de lo que las abuelas y abuelos son capaces de hacer por sus nietos. Si no que se lo digan a Kathy Patten que revivió en el mismo instante en que su hija daba a luz a su nieta.
Un desafortunado paro cardíaco estuvo a punto de convertir el día más feliz de Stacey en el más triste. La joven se encontraba de parto justo cuando su madre sufría un ataque al corazón que la dejó clínicamente muerta durante 45 minutos.
Mientras se encontraba empujando, nada le hacía pensar que su madre había fallecido. Además, Stacey tuvo serias complicaciones durante el parto que iban en aumento. La niña estaba atrapada y había que realizar una cesárea de urgencia.
Por fortuna, todo fue un éxito. Tras 39 horas de parto, tanto el bebé como la madre se encontraban en perfecto estado. Un momento angustioso que hacía presagiar lo peor, pero que, afortunadamente, superó.
Mientras esto sucedía, Kathy era sometida a una reanimación cardiopulmonar que logró revivirla. "Estoy muy agradecido de que Dios me haya dado una segunda oportunidad", decía. "Voy a ser la mejor persona que pueda ser", añadía.
Dos milagros en el mismo hospital
La rápida actuación de los médicos y la insistencia en la reanimación hicieron posible que Patten conociera a su nieta. Aunque se tratara del octavo nieto de Kathy, no estaba dispuesta a irse sin poder conocer a la pequeña Alora.
"Es muy aterrador, regresar es una segunda oportunidad en la vida", explicaba la mujer tras recuperarse del infarto.
Su hija, que también lo pasó muy mal durante en el parto, no puede ocultar lo agradecida que está de que todo haya salido bien. "Fue el destino que se suponía que mi mamá estuviera aquí y, en última instancia, fue debido a Alora que mi mamá está aquí", decía.
"Resultó estar en el lugar correcto en el momento correcto", añadía Stacey muy emocionada. Madre e hija tienen claro que ese día se produjeron dos milagros que han permitido juntar a las tres generaciones.
El caso no ha pasado desapercibido para los trabajadores del hospital, cuya historia corre por los pasillos del edificio. Todos se hacen eco de lo ocurrido a esta familia y los médicos que atendieron a Kathy le dieron las gracias por ser un ejemplo.
Nos has enseñado lo que significa vivir, nos enseñaste lo que significa no rendirse", decía el médico de urgencias Dov Frankel.
Un agradecimiento mutuo, ya que la hija de Patten no olvida el esfuerzo que los médicos ejercieron para devolverle a su madre. Si estos no hubieran intentado por todos los medios la reanimación cardiopulmonar, Kathy no estaría junto a ellas.
Ahora, las tres se recuperan de la experiencia límite que han vivido dispuestas a aprovechar al máximo esta segunda oportunidad. Mirándolo bien, abuela y nieta nacieron a la vez.
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