Cuando se trata del karma, todo es causa y efecto. Sin una cosa, no puede haber la otra. A la hora de hacer cambios significativos en tu vida, querrás que todas las causas tengan efectos positivos. Eso significa que debes tener la habilidad de reconocer los patrones de comportamiento y acción que hay en tu vida. ¿Estás siempre en crisis, o vives en paz y armonía? Los patrones de tu vida revelan las verdades más profundas que el karma está tratando de enseñarte. En esta ocasión te presentamos cuatro leyes kármicas que necesitas conocer. Estúdialas y descubre lo que revelan sobre tu vida.
1. Crecimiento
La ley del crecimiento indica que siempre tienes la capacidad de crecer y de transformarte, sin importar en qué circunstancias te encuentres. Podrías estar pasando por un divorcio tormentoso, o tal vez estés a punto de conseguir un trabajo nuevo, pero aún así podrás encontrar algo que estimule tu crecimiento personal.
2. Responsabilidad
Hay personas que pueden lastimarte, que pueden ponerte zancadillas o decirte mentiras. Pero tú eres responsable final de tu reacción. La forma en que reaccionas a las decisiones de los demás revela mucho sobre ti; puedes aprender mucho sobre ti estudiando las reacciones que tienes respecto a otras personas. ¿Tienes tendencia a ser una persona crítica o quisquillosa? Necesitas aceptar la responsabilidad de tus pensamientos y acciones. ¡El karma lo dice!
3. Cambio
La ley del cambio establece que nada cambiará hasta que tú lo hagas. Es decir, si estás en un patrón repetitivo de tristeza, entonces necesitas hacer algo para cambiar eso; de lo contrario, ese patrón seguirá su curso sin interrupción. El cambio debe ser adoptado primero desde el interior. Tienes que decidir hacer algo diferente y luego tomar medidas significativas para que esa decisión se manifieste en el mundo real. No basta con decidirse a cambiar; también hay que poner ese pensamiento en acción.
4. Vivir en el presente
En última instancia, el presente es todo lo que tenemos. El karma nos recuerda que debemos vivir en el momento presente en vez de pensar excesivamente en el pasado o solamente soñar con el futuro. El pasado ya ha terminado; no podemos hacer nada para cambiarlo. El futuro aún no ha llegado, y pensar en él no va a hacer que llegue más rápido. Es fundamental amar el momento presente.
El karma tiene mucho que enseñarnos; no se trata solo de que nos sintamos mal por las decisiones del pasado. Cuando eliges aprender las lecciones del karma, puedes empezar a vivir una vida más plena y brillante. Muéstrale esta lista de lecciones kármicas esenciales a alguien que quiera vivir con más conciencia.
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